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“Indiscutiblemente, Avance es mi primer hijo”

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Periodistas de Avance

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*María Emilia es la madre del único diario impreso en Los Teques

 Los nombres de Rómulo Herrera y María Emilia Guarino son referentes obligados cuando de la historia del diario Avance se trata. Él por ser padre fundador de esta criatura que hoy arriba a sus 30 años de trayectoria ininterrumpida; y ella por ser una de las primeras personas que apoyó a Herrera durante la travesía, siendo prácticamente la única periodista con la que contaba este medio en sus inicios.

A través de contacto telefónico, Guarino nos concedió la entrevista desde Panamá y manifestó su beneplácito, orgullo y satisfacción por hacer parte valiosa de esta memorable edición especial. “En los inicios, antes de convertirse en diario, cuando circulaba esporádicamente, redactábamos de todo Rómulo y yo, teníamos el deseo inmenso de hacer un medio de comunicación que fuera el vocero del pueblo”.

Refirió que hablar del diario Avance es hacerlo de Rómulo Herrera, por ser un proyecto que a punta de trabajo del bueno y mucha perseverancia, se empeñó en sacar adelante. “Lo tenía en su corazón desde muy muchacho cuando vivía en Zaraza, su pueblo natal. Allí hizo un pequeño periodiquito con el nombre de Avance. Tras venirse a Los Teques, se instaló en la calle Páez frente a la Cruz Roja y allí comenzó todo”.

Una vez que María Emilia se estaba graduando como periodista, conoció al señor Rómulo, de la mano de Roberto Ríos y Georgina Cordero. “Yo necesitaba trabajar y él me dio la primera oportunidad un 10 de septiembre de 1985, comenzamos una lucha titánica ante la ausencia de recursos, paralelo a ello, trabajé en la Gobernación de Miranda. Fueron años muy hermosos porque imperaba el deseo ferviente de darle voz al pueblo mirandino”.

Con lujo de detalles, relató que con mucho esfuerzo se logró un crédito por Corpoindustria y con eso se adquirieron unas máquinas en Margarita para la rotativa, que fueron traídas a Los Teques para darle vida en 1987 al primer, y hasta ahora único diario impreso en esta ciudad, que comenzó siendo completamente a blanco y negro.

Subrayó que pasó por esta casa alrededor de tres veces. “Comencé como reportera de calle, fui editora nocturna, jefa de Información y hasta jefa de Redacción, Avance para mí lo es todo. Allí aprendí, lloré, me enamoré, tuve a mi hija Verónica, crecí a nivel personal y profesional; indiscutiblemente, ese periódico es como mi primer hijo. Lo llevo tan arraigado que hoy día, aquí en Panamá, estoy llevando adelante un proyecto periodístico digital al que he bautizado El Avance del Oeste, pronto tendrá versión impresa con el favor de Dios”.

Periodismo en dos tiempos

“Recuerdo perfectamente y con mucho cariño a Carlos ‘Cachucha’ Arteaga, Martínez Fuentes, Ricardo Ibáñez, Giuseppe Guarino, Henry Herrera, César Oberttein, Ricardo Aquino, Álvarez Vitta, Millie Zurita, Yasmín Devesa, Ronald Peñaranda, Carlos D’Hoy, Alba Terán, Luis Viera, Carmen Terán, José Vírgüez, Jesús María Sánchez, entre otros; se hizo trabajo sano y del bueno”.

Sin vacilo alguno, señaló que el boom de este periódico fueron, son y seguirán siendo las comunidades. “Aun cuando cubríamos todas las fuentes, el hecho de dar protagonismo a los problemas del pueblo ha sido la clave del éxito. Me encantaba patear calle en todas las comunidades de Los Teques, oír a la gente y transmitir sus necesidades, ponerme en sus zapatos; lo mejor era que a esos problemas se les diera solución gracias a la denuncia oportuna en Avance”.

Para ella, la forma de hacer noticia antes era muy distinta. Explicó que los profesionales de la vieja escuela eran un poco sumisos, no faltaba nunca el seguimiento a las informaciones hasta que moría la noticia, siempre que lo ameritara; pero los de hoy son en su mayoría muy orgullosos y no aceptan sugerencias.

“Siempre recomendé tanto a periodistas como a reporteros, y lo sigo haciendo, que estén alertas permanentemente porque en cualquier parte hay información valiosa. Asimismo, les digo que no acepten el palangre; es decir, que no vendan su dignidad profesional por dinero, amiguismo o un favor personal”.

Hechos trascendentales

Al consultarle a María Emilia sobre las noticias que marcaron pauta en los Altos Mirandinos en los tiempos en que ella laboró para este rotativo, mencionó una terrible inundación que debió cubrir en el barrio El Nacional y que arrastró varias viviendas.

“Me impactó muchísimo un trabajo que hice con Fernand Hernández, se trató de un hecho que ocurrido en Valles del Tuy. Un empresario muy adinerado fue víctima de una invasión de terrenos y él metió máquinas para tumbar los ranchos, la gran mayoría de las personas lograron salir, pero hubo una señora en silla de ruedas que no tuvo la misma suerte y fue aplastada por uno de esos grandes aparatos; fue terrible. A ese señor lo trajeron detenido para Los Teques, el hermetismo para con la prensa era pronunciado, pero magistralmente Hernández logró la gráfica que me serviría para acompañar la nota que redacté para registrar su condena”.

Otro evento que aseguró haberla marcado fue el de una doméstica en San Antonio de los Altos que se practicó un aborto con un gancho de ropa. “Tenía dos hijos grandes, era muy humilde, se enamoró de un heladero y quedó en estado. Desesperada, recurrió a esa acción, luego metió al bebé en una bolsa negra y lo arrojó a la basura; fueron los señores del aseo quienes se percataron del pequeño cuerpecito y dieron parte a las autoridades; la entrevista que logré hacerle me impactó mucho”.

También mencionó como una anécdota inolvidable, la visita inesperada de un pequeñín de cuarto grado de primaria que se presentó en plena sala de redacción “para demandar a su colegio” ubicado en el 23 de Enero en Los Teques.

“Con una seguridad impresionante, tal como un adulto, nos contó todo, tomamos su declaración y la publicamos, tuvimos un problemón porque se trataba de un menor, afortunadamente lo subsanamos, pero lo mejor de todo es que gracias a eso su escuela recibió las respuestas que él buscaba. De hecho, se me ocurrió la idea de implementar El Tequeñito de Avance, un encartado donde tenían cabida semanalmente, de una forma especial, las escuelas y los niños”./ac

Por Maribel Sánchez

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