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“Nací para cocinar, no me imagino en otra cosa”

Mario Rangel

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Karines Sabino

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Tener una familia unida, que siempre te apoye en tus proyectos, es la premisa de Mario Rangel, un cocinero reconocido por sus peculiares platillos en los diferentes lugares donde ha trabajado, ya que siempre incluye las exquisiteces del mar.

Disciplina y ambición

Mario es un hombre nativo de Guayana, estado Bolívar, quien hace 45 años decidió venir a Caracas a experimentar cosas nuevas, entre ellas explotar sus dones culinarios, trabajando en distintos establecimientos como ayudante de cocina.

“Al cabo de un tiempo me di cuenta que podía tener mi propio restaurante, con la colaboración de mi esposa y mi hijo logramos un negocio netamente familiar donde pudiese realizar todas esas comidas que la gente me pedía, sobre todo aquellas que tuviesen mucho que ver con los mariscos y moluscos, ya que esta era mi verdadera pasión”.

Con todos sus años de experiencia en la cocina, además destacándose en los productos del mar, este hombre indica que cada día se aprende algo nuevo que ayuda a las personas a ser mejores, “no hay un día que no nos deje una lección, así tengamos muchos años haciendo algo siempre conocemos cosas nuevas, y más en este oficio en el que siempre debemos reinventarnos”.

El mismo amor que le profesa a la comida lo reparte en grandes dosis a su familia, con la cual comparte la dirección de su sexto y muy reconocido negocio, llamado El Chalet de Mario, donde ofrece una gran variedad de platos, siendo este el único restaurante de marisquería en la capital mirandina, ubicado en la zona industrial 2 en Los Teques, el cual ya lleva 16 años ofreciéndole deliciosas comidas a diferentes personas.

Este lugar se ha vuelto famoso por sus especialidades, incluyendo la ensalada césar de camarones que en muy pocos lugares se puede conseguir, al igual que los asopados de mariscos, las cazuelas, pastas y nunca deja por fuera los productos cárnicos, pues en el lugar también se pueden conseguir en sus diferentes cortes, también ofrece churrascos y pollos en distintas versiones, todos con su toque especial “cada cocinero tiene su secreto para llamar toda la atención de los clientes”.

Un apoyo incondicional

“Al mismo tiempo que trabajo disfruto de mi familia, al estar todos juntos en el mismo negocio también lo hago con mis amigos, con todo mi entorno, ya que hay mucha gente que me conoce y no hay un día que no me sienta bien con mi trabajo, yo nací para la cocina y asimismo moriré, no me veo haciendo otra cosa que no sea esto”.

Durante esta grata entrevista se le preguntó a Mario cual sería la anécdota que más recuerda, y con toda seguridad manifestó que durante toda su trayectoria aún no ha ocurrido nada de lo que se pueda avergonzar, asimismo agradeció a Dios por siempre mandarle cosas buenas, “lo mejor que me ha podido pasar en mi familia es llevármela bien con ellos y poder contar con su apoyo, en todo momento, es lo que me hace feliz todos los días y me motiva a continuar cocinando”.

En ese sentido, detalló que en ocasiones no es necesario tener una carrera profesional, “a veces basta con amar lo que haces e interesarte siempre por lo que te gusta, yo no estudie en ninguna escuela de cocina, tampoco he ganado premios, pero mis clientes todos los días reconocen mi labor y me agradecen por prepararles las comidas que les gustan, sin necesidad de ir a una zona turística, ese es mi mejor premio”.

Decenas de exquisiteces en un solo lugar

 Este gran cocinero resaltó que a pesar de que su restaurante está un poco alejado del centro de Los Teques las personas no dejan de asistir, sobre todo por la gran cantidad de clientes que he hecho con el pasar del tiempo, “el hecho de que este ubicado en una zona industrial no implica que vengan puros camioneros a comer a este lugar, he recibido visitas de comensales de grandes empresas de la capital, incluso han venido personas desde lugares cercanos como Carrizal y San Antonio, eso es lo bueno de crearse un buen perfil y un gran prestigio”.

Finalmente, dio un consejo a las nuevas generaciones que quieran especializarse en este tema, bien sea estudiando o aprendiendo con lo que comen, escuchen, observen y lean, para que hagan bien lo que verdaderamente les apasione, “Cocinar es algo que se ha hecho durante toda la historia de la humanidad, hay diferentes estilos, ingredientes, modelos y sabores lo importante de todo esto es sentirse identificado con lo que realmente nos gusta, todo novato en la cocina debe experimentar. Dejar el temor a equivocarse y usar su memoria degustativa. Para entender y adelantarse a los sabores que tendrán sus platos, antes de elaborarlos”./no

Fotografía: Alexander Offerman

 

 

 

 

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