La infancia está llena de golpes. Sin embargo, tales golpes, inevitables entre los niños (incluso los más tranquilos) rara vez hacen acto de presencia en la publicidad.

Sin embargo, la marca noruega de leche Tine ha decidido convertir los “trancazo” infantiles en los protagonistas de un nuevo spot que destaca por su realismo (no exento de sangre).

En el spot aparecen niños enfrentandose en batallas de almohadas, siendo golpeados en el rostro por balones, perdiendo el equilibrio en camas elásticas, “volando” a bordo de bicicletas e incluso cayendo a plomo desde el techo.

Acompañado de los acordes de la canción (atinadísima) “It’s a Hard Knock Life” del célebre musical Annie, el spot consigue transmitir así al espectador lo divertida (pero dolorosa) que resulta la vida de los niños.

“Active bodies need the right fuel” (Los cuerpos activos necesitan el carburante adecuado) es el lema que pone el broche de oro al spot de Tine.

Firmado por la agencia Try Oslo y el regidor Martin Werner, el nuevo anuncio de Tine resultó extraordinariamente complejo de filmar, puesto que sus autores tuvieron que ingeniárselas para simular que los niños que lo protagonizan se hacían daño sin que resultaran lastimados realmente.