Jóvenes encapuchados se enfrentaron desde las 4 de la madrugada a la GNB en la entrada de Montañalta. Colectivos amenazaron al vigilante y causaron destrozos y terror en la urbanización Loma Mágica, frente a La Cascada

Ronald Peñaranda. Un total de 12 detenidos, 6 lesionados y destrozos en bienes públicos y privados fue el saldo del enfrentamiento entre militares y manifestantes que se suscitó en el kilómetro 20 de la carretera Panamericana a la altura de Montañalta en Carrizal.

Se conoció que cuatro de los aprehendidos permanecieron por varias horas dentro de dos tanquetas de la Guardia Nacional Bolivariana que llegaron al mediodía con la intención de dispersar la protesta. Entre los lesionados se encuentran seis uniformados, quienes presentaron politraumatismos generalizados y seis civiles, uno de ellos con herida cortante y los cinco restantes afectados con perdigones. A las 4:00 am, un grupo de jóvenes, que cubría sus rostros con camisas y chemises, montaron barricadas y quemaron cauchos en los cuatro canales de la vía. Se enfrentaron con piedras, palos, botellas, molotov, a los guardias y estos respondieron con bombas lacrimógenas. La batalla campal se extendió hasta la noche

En horas del mediodía, motorizados aparentemente miembros de los denominados colectivos afectos al oficialismo, atacaron la urbanización Loma Mágica, frente al centro comercial La Cascada. Según testimonios de los vecinos, los sujetos que cargaban armas de fuego destruyeron el portón principal del conjunto residencial, rompieron los vidrios de las ventanas de varios apartamentos y luego le echaron candela a la caseta de vigilancia.

“Lo más preocupante es que esos tipos salvajes pararon sus motos en plena vía y actuaron ante la mirada indiferente de efectivos de la Guardia Nacional que llegaron al lugar dizque a dispersar la manifestación violenta”, declaró una lugareña que no quiso dar su nombre.

En la tarde, en medio del enfrentamiento se registró un incendio en una zona boscosa en el sector que colinda con la calle Mérida de Colinas de Carrizal, lo que generó más alarma entre los residentes que aseguraron que las llamas fueron ocasionadas por las bombas molotov. Familiares de pacientes del Centro Médico Docente Los Altos reportaron afecciones respiratorias ocasionadas por los gases lacrimógenos.

Cayeron menores con bomba

El jefe de Operaciones de Policarrizal, Henry Fernández, informó sobre la detención de dos adolescentes de 15 años, quienes tenían en su poder una bomba lacrimógena. Dijo que uno de los menores escondía el artefacto en sus partes íntimas. “Cuando uniformados de la Brigada Motorizada despejaban la vía y agilizaban el tránsito cerca de Corralito notaron la actitud sospechosa de los jóvenes que al revisarlos poseían la lacrimógena”. Afirmó que los detenidos, que viven en La Ladera, fueron puestos a la orden de la Fiscalía 15 

Alcalde se desliga de grupos violentos

El alcalde de Carrizal, José Luis Rodríguez, declaró que desde la madrugada efectivos de la Policía Municipal se apostaron cerca de la entada de Montañalta para persuadir a los manifestantes. “Temprano se retiró una barricada, los muchachos se fueron tranquilamente pero posteriormente un grupo de individuos, que no sabemos de dónde salieron, pusieron una más grande y fue la que mantuvo durante horas la carretera trancada”.

Precisó que su despacho a través de Policarrizal actuó apegado a la ley. Nuestro llamado es a la conciencia, a seguir protestando pero de manera pacífica, con pitos, banderas, pancartas, entusiasmo, pero sin afectar e impedir el libre tránsito o vulnerar los derechos de los demás”. Recalcó que las barricadas están prohibidas. “Hay una decisión del Tribunal Supremo de Justicia y nosotros como alcaldes debemos acatar esa medida. Debemos mantener las vías despejadas”.

Indicó que notificó de la situación a la Guardia del Pueblo y mantuvo comunicación con el viceministro del Sistema Integrado de Policía, Marcos Jesús Rojas Figueroa, “quien en todo momento estuvo atento”. El mandatario apuntó que obreros de la Dirección de Servicios Públicos intentaron recoger las piedras, botellas, cauchos y demás objetos que lanzaron, pero no los dejaron hacer su trabajo.