A la mujer la enterró en un hueco y a los niños cerca de una planta de tratamiento
Una condena de 30 años de prisión recibió Rafael Mendoza (55), luego de aceptar su responsabilidad en el femicidio de su pareja Onelia del Valle Guerra (28) y de su hijastra de 10 años, así como el homicidio de otro hijastro de nueve años de edad, caso que se descubrió en diciembre de 2024 en el municipio Tubores, en el estado Nueva Esparta.
La hermana de la mujer acudió al Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas para denunciar la desaparición de ella y sus dos sobrinitos.
Dijo que no los veía desde hacía cuatro días y cuando fue hasta su casa el cuñado le manifestó que no sabía nada de ellos y le negó el acceso. Sin embargo, una vecina le comunicó que la última vez que había visto a Onelia fue el 17 de diciembre.
Efectivos del Cicpc se trasladaron hasta la residencia de la familia ubicada en el sector La Punta La Garza, pero no hallaron evidencias criminalísticas. Sin embargo, mediante entrevistas a vecinos y conocidos, se supo que el sujeto había solicitado una chícora prestada para cavar un supuesto pozo séptico, reseñó el Ministerio Público.

El terrible hallazgo
Las indagaciones determinaron que el hoy sentenciado estuvo todo el 16 de diciembre de 2024 en labores de excavación. El día siguiente, se escucharon discusiones entre el victimario y su pareja, además del llanto de los niños.
El 18-D vieron al sujeto salir de su vivienda con bolsas negras cargadas al hombro. Tras una nueva visita al domicilio notaron manchas rojas en uno de los colchones; mientras que en el patio observaron una zona con signos de remoción de tierrade donde provenían olores putrefactos. Al excavar, se ubicó el cadáver de la fémina. Mientras que cerca de una planta de tratamiento encontraron los cuerpos sin vida de los dos menores. Los mató porque no aceptó el fin de la relación.
Las fiscalías 47ª Nacional y 1ª ratificaron la acusación contra el individuo por la comisión de femicidio agravado en perjuicio de Guerra Gómez y de su hijastra de 10 años; además de homicidio calificado por motivos fútiles e innobles agravado en perjuicio del niño de nueve años.
El Tribunal 3º de Control acordó la pena que deberá cumplir en el Centro de Formación para Hombres Nuevos Nelson Mandela; ubicado en Monagas.