Los químicos requeridos para la elaboración de las compresas utilizadas durante la menstruación incluyen sustancias que podrían estar contaminadas con dioxinas, compuestos de cloro y pesticidas de algodón no orgánico, según un estudio realizado por la organización mundial Women’s Voices For The Earth.
Estos elementos sintéticos han sido relacionados con la aparición de cáncer, problemas endocrinos y problemas a nivel reproductivo, como disminución de la capacidad fértil e inconvenientes en el desarrollo durante el embarazo.
“La mayoría de las mujeres utilizan toallas sanitarias, además de ser altamente contaminantes, existen pruebas de que pueden generar daños irreversibles en el organismo a largo plazo. En los casos más comunes, se ve la aparición de hongos, irritaciones o alergia, lo que puede alterar el flujo vaginal”, explicó Damián Zulano, ginecólogo. /DB/at
Luis Maizo