Los venezolanos pasaron de consumir 38 kilos de harina de maíz precocida a solo 30 kilos por año, según los datos publicados por la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), lo que refleja una disminución en la ingesta de distintos alimentos, como las arepas.
Señalaron que siguiendo los resultados de sus indicadores, el 71% de los ciudadanos manifestaron cierta preferencia a desayunar arepas, mientras que solo el 49% mantuvo que es mejor comerlas en la cena.
Otros rubros como el arroz, el azúcar y otros derivados del maíz, también presentaron una disminución considerable, según Celso Fantinel, presidente de Fedeagro.
“En el arroz ni se alcanzan los 25 kilos per cápita, esperamos consolidar un mayor apoyo financiera para impulsar la producción y lograr una mayor estabilidad alimentaria”, dijo.
Una de las limitantes mencionadas por los consumidores ha sido el constante alza de costos que ha reducido la cantidad de alimentos que pueden llevar a su mesa.
“Claro que compro menos harina al año, antes me comía tres arepas, ahora solo puedo desayunar una porque tengo que rendir cada gramo para poder llegar a fin de mes con comida en la alacena”, señaló Fernando Noguera, padre.
Mientras que a comienzos del 2022 podía adquirirse un bulto de harina de maíz por $20, en la actualidad, una sola unidad puede superar los $3 dependiendo de la marca y el lugar de compra, lo que representa al menos ¾ del salario mínimo actual./DB/at