El sector está totalmente abastecido y ofrece variedades del producto
La proyección para el primer semestre de 2023 en el sector panadero se muestra positivo, debido a que la importación de la materia prima es óptima para la elaboración de todas las variedades de pan, pero la mayor limitación está en el bajo poder adquisitivo de los consumidores.
Así lo señaló Julio Solorzano, encargado de la panadería Hiper Modelo, quien certifica que a diferencia de los años 2016 – 2017 que hubo una grave escasez de pan, el mercado se encuentra totalmente surtido del trigo que llega con regularidad desde Canadá y de Turquía.
“El sector panadero está equilibrado y sin escasez de insumos, solo que, el consumo ha mermado y por su puesto cada panadería ha adecuado su producción y reducido el personal, porque su manufactura y venta han bajado, como consecuencia del disminuido poder de compra en la población”.
Puso como ejemplo que si un grupo familiar tenía como costumbre comprar tres o cuatro canillas, ahora solo puede comprar dos y de manera interdiaria, “no la puede llevar a su hogar todos los días”.
Número uno
Recalcó que el pan sigue siendo el producto más económico del mercado, al margen de la harina de maíz precocida.
“Un pan promedio cuesta $0.15 centavos de dólar equivalente entre 2 o 4 bolívares, más menos valor de un pan francés, mientras que el paquete de harina para hacer arepas cuestas $1.30 para elaborar un promedio de 14 arepas por un costo de $0,07. A eso agrégale todo lo necesario para su elaboración final, bien sea frita o asada”.
Destacó que el pan es el producto número uno del país, por ser más económico y su principal consumidor de menos ingresos.
“La disponibilidad monetaria no tiene la fortaleza de otros años, hoy día una persona sostén de familia que devengue un salario mínimo, no puede llevarse diariamente 20 panes para su casa”.
Mucha competencia
Sobre la producción de La Modelo explicó que diariamente amasan entre 10 y 12 sacos diarios, mientras una panadería, ubicada en el centro de la ciudad, puede procesar entre tres o cuatro sacos aproximadamente.
“Todo depende de su ubicación y del diseño de las estrategias de venta que aplique cada negocio para captar a los compradores. En el caso nuestro ofrecemos combos de pan, 10 panes por $1.50; cuatro canillas por $1 para atraer la gente. A veces el panadero sacrifica parte de su utilidad para vender un poco más barato y ser más competitivo en el mercado”.
Sostiene que la competencia “no juega carritos”, se manejan precios similares entre los negocios del rubro, a pesar que no existe un acuerdo para la fijación de precios.
“Allí jugamos con la calidad, servicio y precio, si al cliente gusta nuestro producto siempre te detienes a comprar, pero no te gusta el precio examinas otras opciones, eso es relativo”.
El encargado de otra panadería, precisó que mientras el ingreso salarial no mejora, la tendencia en el sector se mantendrá hasta finales de 2023.
“A menos que el Estado o los políticos acepten y paguen mejores salarios a los trabajadores del sector público, porque el sector privado tiene a su personal mejor pagado. Si los políticos pierden el miedo y salen a trabajar como debe ser a la calle, verán que el dinero rueda”. /MD/rp Foto: Jesús Tovar
