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Peluquerías y barberías con escasa clientela

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Leida Oliveros

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Muchos atribuyen la situación a la temporada vacacional

Peluqueros y barberos de la capital mirandina, se las ingenian para atraer a sus clientes, debido a que en las últimas semanas ha mermado un poco la actividad, situación que estos profesionales de la belleza la atribuyen a la temporada vacacional.

“Muchos de nosotros estamos guapeando porque ha bajado la clientela. La gente anda en otra cosa. Muchos no consideran prioridad ir a la peluquería, tienen otras necesidades que cubrir”, manifestó a Avance Gregorio De Abreu, quien dese hace más de tres décadas está en Gregorio Style, ubicado en el edificio Don Pedro, en el bulevar Vargas en Los Teques.

Agregó que, debido a la poca afluencia, muchos negocios de este tipo han tenido que bajar los precios. “En nuestro caso tuvimos que hacerlo, porque si no, no trabajamos. Si la persona trae su tinte, yo le cobro $ 5 por la aplicación, el corte y el secado también al mismo precio. Los peluqueros pagan $ 15 semanal por el alquiler de las sillas”.

William Corrales, barbero que trabaja en Andrea Polanco Studio, en la calle Junín declaró: “Siempre baja en vacaciones. Yo tengo 14 años trabajando y todos los años ha sido igual, se reactiva en septiembre”.

Indicó que mientras esto pasa, ellos deben cumplir con sus responsabilidades. En su caso tiene que cancelar $100 mensuales por la silla que usa para trabajar dentro del local.

Mary Castro de Thendy´s Barbesshop, situada en la calle Sucre, afirmó que siempre tienen cosas que hacer porque ya tienen su cartera de clientes.

Paga $ 30 semanal por la silla. Los precios de los cortes oscilan entre $3 y $5. “Todo depende del largo del cabello, a veces las personas no tienen dinero y le damos un buen precio. El cepillado va desde $ 5 hasta $ 8”.

Competencia desleal

Algunos se quejan de la proliferación de barberos informales, sobre todo en barriadas de la ciudad. Sandro Ciofani, responsable de la Barbería Los Teques en la calle Ayacucho y con 40 años de experiencia, dijo que últimamente ha estado flojo el negocio.

“Hay mucha competencia en el sector de la barbería sobre todo en comunidades, pero uno también ya tiene sus clientes, quienes conocen mi trabajo”.

Él cobra $5 por el corte y los diseños que le solicitan los hace entre $1 y $3. Por la silla debe pagar $10 diarios.

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