Incertidumbre económica genera desánimo en el sector
Como es ya tradición en noviembre se lleva a cabo el Black Friday o “Viernes Negro” por parte de las grandes cadenas de comercios, quienes con sus ofertas captan a gran cantidad de clientes quienes aprovechan la oportunidad.
Costumbre que nace en Filadelfia (Estados Unidos) en la década de los 50. En vista de la ocasión, el equipo de Avance realizó un recorrido por los centros comerciales de la ciudad, encontrando desánimo y desinterés por parte de los vendedores.
Al contactar a representantes del C.C Paseo Mirandino, unos expresaron no saber nada al respecto. Mientras otros indicaron que a lo mejor se organizan y hacen algo.
En el C.C La Hoyada, una vendedora manifestó que ahí nunca participan. “Sería bueno hacer algo, para ver si logramos vender un poquito más”.
En los C.C Hito y en Los Nuevos Teques, no tienen ni idea de participar ante lo cambiante que está la economía, señaló la encargada de una tienda.
Por otra parte, tiendas como Damasco, La Total y Makía, están a la espera de instrucciones para publicar sus descuentos en este 2024.
Pérdidas
Avance contactó a Bernardo Calvo presidente de la Cámara de Artesanía, Pequeña y Mediana Industria de Miranda (Capmi), respecto al tema, quien afirmó que el entorno económico produce pérdidas, por causa de las restricciones legales en la interpretación de los precios referidos en dólares.
“Los comercios no tienen la libertad de movilizar sus precios fuera de la restricción del tipo de cambio oficial”.
Sostuvo que se les exige a los comercios recibir billetes extranjeros, en relación a un tipo de cambio ficticio, distorsionando la fijación de precios.
“Si un comprador paga $ 40 Bs. 1.738 según el BCV, está pagando en realidad $ 30 o Bs.1.303. Lo que a su vez forza al comercio a colocar el precio en $ 50 o Bs. 2.172 con el objeto de recibir $ 40.
“Los negocios incurren en pérdidas. Ante esta incertidumbre, es difícil planificar ofertas, que pudieran inducir pérdidas en las transacciones”, resaltó.








