Desde tres hasta cuatro tanques se han visto obligadas a adquirir las familias del sector Mario Briceño, en Barrio Miranda I, para paliar los extensos ciclos de distribución del suministro que corresponde de forma mensual, situación que ha puesto a más de uno a ingeniarse alternativas hasta la llegada del líquido a las tuberías.
“El jueves pasado nos llegó después de un mes y quince días sin agua. Siempre es así, por acá mandan muy lejos los ciclos de distribución y cuando llega dura como mucho tres días y la quitan. En ocasiones anteriores hemos pasado hasta tres meses esperando y sacando agua de donde no hay”, señaló Fabián Ruiz.
Anteriormente contaban con el servicio cada 20 días, lapso que se fue incrementando hasta una espera que oscila entre cuatro o cinco semanas, “si no hay ningún atraso como el de este que paso”.
Avance constató que gran parte de las viviendas poseen más de un par de tanques de almacenamiento para lograr cubrir las necesidades básicas y de higiene mientras se cumple el tiempo correspondiente para abastecerse con el líquido: “hay quienes tenemos un solo tanque y llenamos los frasquitos que tengamos por ahí”.