Salieron en procesión eucarística por la Bolívar y la Ribas
Arreglada con un hermoso vestido blanco la Virgen María pasó de ser La Dolorosa, tras sufrir la pasión de su hijo Jesucristo, en la Virgen de la Alegría y la Esperanza para celebrar junto a los feligreses de Los Teques la Pascua de Resurrección en la Catedral San Felipe Neri; donde el obispo Freddy Fuenmayor celebró la misa y posterior procesión.
Evocando el mensaje enviado por el Papa Francisco, quien aún convaleciente, apareció este domingo 20 de abril en el balcón de la Basílica de San Pedro en Roma para desear una “Feliz Pascua” a los miles de fieles reunidos para la fiesta más importante del calendario cristiano.
“Es momento de alegría para todos porque Cristo Resucitó. El Papa nos invita a ir corriendo hacia la meta de seguir a Cristo, así como los atletas llegan hasta el final para recibir un premio, nosotros debemos hacerlo para vivir en él porque nos salva y nos promete un regalo eterno; es una carrera que bien vale la pena hacer”, dijo el sacerdote.
Invitó a cientos de feligreses presentes a tender una mano a quienes lo necesiten, mostrar solidaridad con aquel hermano que sufre, con el enfermo que padece. Minutos antes, recorrió los pasillos internos de la iglesia para bendecir el agua en medio de una emotiva ceremonia.
Isabel Villegas, vecina del casco central de la ciudad, dijo que pedía al Dios Vivo su intercesión ante las guerras y desastres naturales que ocurren alrededor del mundo.
“Él, Jesús, es símbolo de esperanza. Toda nuestra fe tiene que estar depositada en él, por eso le imploro por la paz y la sanación del alma; así como también por la tranquilidad de nuestro país y el reencuentro de las familias”, dijo con una tierna y envolvente sonrisa.

Al finalizar, recorrieron a lo largo de una cuadra la avenida Bolívar con calles Junín, Ribas y Guaicaipuro para acompañar la procesión eucarística en la que adoraban al Santísimo.
La tradicional quema de Judas

A las afueras de la catedral, en la Plaza Danilo Anderson, decenas de personas se dieron cita para quemar a dos muñecos de trapo, que para ellos emulaban al traidor Judas Iscariote, quien traicionó a Jesús por 30 monedas de plata. Los personajes a quienes este grupo de personas decidieron prenderle fuego fueron Donald Trump y María Corina Machado, porque a juicio de los presentes en la actividad se han encargado de “traicionar al pueblo, propiciando una infinidad de situaciones que atentan contra la paz y la tranquilidad de los venezolanos”.