Tres vecinos de la populosa barriada auxiliaron a los tripulantes
El sábado 1º de julio del año 2000, pasadas las 8:30 am, un helicóptero de la Fuerza Aérea Venezolana, siglas 1677, se estrelló contra el cerro Las Peñitas, ubicado en Guaremal, considerada como la barriada más poblada de Los Teques.
Los cuatro tripulantes, el teniente José Loredo Aserey (piloto), el teniente de aviación Luis Caraballo Gómez (copiloto), el sargento técnico de segunda Orlando Moreno y el sargento técnico de primera Joel Lamuño, resultaron gravemente heridos.
Avance que dio amplia cobertura al suceso, informó en la edición del domingo 2 de julio, que la aeronave modelo Aloutte, de fabricación francesa, perteneciente al Grupo de Operaciones Nº 10, salió a las 8:00 am de la Base Aérea Palo Negro, estado Aragua, rumbo a la Base Aérea Luis del Valle García de Barcelona (Anzoátegui).
Fuentes oficiales informaron que después de media hora de haber despejado, el piloto comunicó a la torre de control de la Base Aérea Libertador que el helicóptero presentaba una falla mecánica en el rotor de cola.

Como a las 8:30 am, residentes de la populosa zona expresaron su asombro al ver que del aparato salían maletas y demás equipaje de los tripulantes. Luego se dieron cuenta que el helicóptero daba vueltas y vueltas en el aire tratando de aterrizar en el sector Santa María. Hubo mucha miedo y tensión.
Pese a las maniobras de los funcionarios fue inevitable que la aeronave perdiera peso y chocara violentamente contra el cerro, a cien metros de un caserío, también hay mismo en Guaremal.
Los héroes
Antes de que el aparato se precipitara a tierra dos de los tripulantes lograron saltar. Sólo el piloto (Loredo Aserey) y el copiloto (Caraballo Gómez) quedaron adentro al momento del impacto.
El primero quedó debajo de los amasijos de hierro y tres vecinos de la comunidad (Jesús Gregorio Castro, Marcos González Pulido y José Castro), quienes se convirtieron en héroes, llegaron al sitio del accidente y rescataron tanto a Loredo Aserey como a sus otros tres compañeros, reseña la nota redactada por la periodista María Elvira Marval, quien cubrió la noticia.
Efectivos del Cuerpo de Bomberos del estado Miranda se encargaron de trasladar a los militares heridos hasta el Victorino Santaella. Todos ellos presentaron politraumatismos. Posteriormente en dos helicópteros Súper Puma de la Fuerza Aérea los llevaron hasta el Hospital Militar de Caracas donde se recuperaron paulatinamente. De este hecho están a punto de cumplirse 25 años.