23/10/15.- Por la falta de ascensores y la muerte de un compañero, alrededor de 200 trabajadores del Victorino Santaella trancaron la avenida Bicentenario por más de cinco horas.
Médicos, enfermeros, camilleros y hasta camareras cerraron el paso desde las 7:30 am, a la altura de la entrada principal del hospital, pidiendo que las autoridades del centro, la directora estadal de Salud, Marisela Bermúdez; y el ministro se acercarán a darles respuestas concretas sobre la situación de los elevadores y la falta de insumos.
“No es posible que hace casi tres meses, el viceministro de Hospitales, Francisco Hernández, visitó el lugar y dijo que iba a arreglar los ascensores y todavía no han hecho nada. Hemos entregado comunicados a la directiva de la institución y tampoco hay soluciones”, aseveró Jenny Montilla, una de las manifestantes.
Puntualizó que ayer, tras varias horas de protesta, les avisaron que la directiva los estaba esperando en el auditorio del recinto asistencial para conversar, pero cuando llegaron no estaban. “Se burlaron de todos nosotros, por eso es que hoy estamos en la calle”.
Por su parte, Jenny Morales, empleada del laboratorio, resaltó que esa especialidad no cuenta con reactivos, papelería ni los demás implementos necesarios para dar respuestas.
“No tenemos inyectadoras ni anestesia para recibir a pacientes en quirófano”, destacó Irene Taguada.
Yilber Giménez, miembro de Sirtracupem, destacó que apoya la protesta, y que todas las irregularidades las han manifestado en distintas oportunidades.
Directiva intentó llegar a un acuerdo
A las 12:00 del mediodía nos comunicamos con el subdirector Eleazar Gutiérrez, y este dijo que el director Delgado intentó hablar con los protestantes. “Él fue a dialogar con la gente para que negociáramos en el auditorio, pero ellos no quieren colaborar”
Luego de esperar un rato, cerca de las 2:00 pm los empleados decidieron conversar con Bermúdez, quien los esperaba en el auditorio.
Según Gutiérrez, esta propuso hacer unas mesas de trabajo para conversar sobre las problemáticas del centro y aportar soluciones.
Por: Skarlet Nieto / Crédito: Gabriel Ordoñez
