No dormir por la noche puede ser negativo para nuestra salud física y mental. Si bien hay mucha gente que prefiere pasar sus noches despierta, lo cierto es que lo usual es dormir en la oscuridad. No se trata de preferencias o costumbres adquiridas, sino que nuestro organismo necesita dormir a oscuras. Veamos la explicación.
Supresión de la melatonina
El uso de luz artificial por la noche causa la supresión de la melatonina en nuestro organismo, una hormona que está íntimamente ligada al sueño. Claro que la falta de ella no solo lleva a no dormir por las noches, sino a contraer ciertas enfermedades como la diabetes, cáncer o sufrir de problemas en el corazón.
Durante el día, la hormona no está presente, pero cuando el sol cae, la glándula pineal comienza a funcionar y a generar melatonina. Como esto solo ocurre en la oscuridad de la noche, las luces artificiales producen que esta hormona no se genere. Entre las luces más perjudiciales se encuentra la luz de ondas cortas o luz azul, producida por los televisores, computadoras o celulares.
Actualmente se venden en las farmacias algunos suplementos de melatonina, aunque los efectos negativos de estas píldoras no son explicados completamente en los paquetes, y la dosis puede no ser la necesaria para nuestro cuerpo. Por lo general, los altos índices de melatonina en estos productos generan depresión y fatiga. Esta hormona solo es positiva cuando es generada naturalmente por nuestro cuerpo.
Aunque esta medicina no es recomendada en el uso diario, sí puede usarse cuando sufrimos de jet lag al viajar a lugares donde las horas son diferentes, debido a que nuestro sueño está cambiado y nuestro reloj interno no puede ajustarse.
La luz en la noche causa depresión
Un estudio reciente realizado a hámsters demostró que crecía el riesgo de que sufrieran depresión cuando se los mantenía cerca de una luz durante la noche. Por ejemplo, no querían realizar tareas que generalmente disfrutaban, ni comer sus comidas preferidas.
En los humanos, este fenómeno también se ha observado desde que la luz eléctrica se popularizó. Cuando las personas tuvieron la posibilidad de cambiar sus ciclos de sueño, manteniéndose despiertos por la noche, los índices de depresión crecieron exponencialmente.
Efectos de la luz por la noche
Los efectos negativos pueden ser contrarrestados si se vuelve a los ciclos nocturnos de sueño, exponiéndose lo menos posible a la luz artificial. Además, se ha constatado que esta luz puede causar ganancia de peso y predisposición al cáncer.
Los estudios demostraron también que estos efectos pueden deberse al desarrollo de una proteína llamada Factor de Necrosis Tumoral (TNF). Al bloquear esta proteína, los síntomas de depresión desaparecen. Es muy útil cuando hay infecciones, porque causa inflamación que ayuda a curarlas, pero cuando es segregada en demasía sus consecuencias son negativas.
Por todo esto, cuando se trata de un problema de insomnio debido a la no segregación de melatonina o por el uso de objetos electrónicos y luces artificiales, es recomendable volver a dormir por la noche. Esto mejora el sueño, algo fundamental si queremos mantener una vida sana o aumentar nuestra inteligencia.
Especial de www.ojocientifico.com