28/06/16 -. Usuarios con terminales de cédula 0 y 1 son los más perjudicados en el sistema de distribución de productos básicos que implementó la Superintendencia de Precios Justos el año pasado, según aseguraron algunos consumidores de la capital mirandina.
La rutina de estos clientes representa un calvario, pues les corresponde comprar el lunes y deben conformarse con el repele del fin de semana.
En el Central Madeirense de La Hoyada, una multitud aguantaba la pela en plena pepa de sol, esperando a ver qué llegaba. Madres con chamos en brazos, ancianos y demás compradores, manifestaron que era la única opción de llevar algo a casa.
“Gano sueldo mínimo y no tengo plata para comprarle a los bachaqueros. Al iniciar la semana pido permiso en el trabajo y me voy a cualquier fila para cazar algo”, fue el testimonio de una dama que se identificó como Miriam Duarte, madre de dos hijos.
A pesar de que le vuelve a tocar los sábados, dijo que es mucho más difícil ese día por la cantidad de gente. Vale recordar, que para esa ocasión compran los terminales de cédula del 0 al 4 y domingos del 5 al 9.
Por su parte, Vicente Marcano señaló que se ve perjudicado por este método de venta, calificó de injusto lo que padecen semanalmente, pues a su juicio, las distribuciones deben ser equitativas para el pueblo.
“Hay empresas nacionales que despachan mercancía a partir del miércoles. No obstante, se acaba cuando nos corresponde”.
Además, hizo un llamado a las autoridades para que le pongan un parao a los revendedores que utilizan varias identidades. “Hay gente que compra todos los días y nadie hace nada, hasta cuando tanta incompetencia”.
En otros comercios de la jurisdicción también se presenta la misma queja. Clientes del automercado San Diego en Los Nuevos Teques, expresaron su descontento y pidieron implementar otros mecanismos para controlar las colas.
“Este método funcionó en su momento el año pasado, pues llegaba mercancía con regularidad y uno se llevaba varios artículos. Actualmente compras uno o dos productos y en el peor de los casos te vas con las manos vacías”, reveló una compradora que prefirió no identificarse.
Viejitos hastiados de las colas
Cándida Mora, coincidió en que está llegando poca a mercancía a los establecimientos y debe hacer maromas para abastecerse. Como usuaria de la tercera edad, consideró un abuso que estén pasando por esta situación para adquirir alimentos.
Yolanda Aponte, quien llevaba unos lentes y una gorra para protegerse del sol, dijo que está cansada de hacer colas y no conseguir nada. “Tengo tres meses sin ver un kilo de azúcar, ni hablar de la harina de maíz, arroz y pasta”.
Para resolver la comida diaria, dijo que está a dieta de calabacín y berenjena. Sin embargo, se encuentra espantada porque las verduras, hortalizas y frutas también tienen precios exorbitantes.
Argenis Salas, expresó su descontento por la situación económica actual. “Hay que multiplicarse por mil para visitar a varios comercios y adquirir productos de la canasta básica”./AR/ lb
Fotos Edgar Jiménez
General: Consumidores se calan filas kilométricas esperando los productos.