La vía, que tiene más de 10 años olvidada, se cae a pedazos
En situación de riesgo está la carretera Paracotos-Tácata, debido a que un sinnúmeros de derrumbes, huecos y fallas de borde han conllevado a que la vía, utilizada principalmente para transporte agrícola y como escape hacia la Autopista Regional del Centro, colapse.
Lugareños afirmaron que está olvidada desde hace años y desconocen por qué el Gobierno regional o la Alcaldía no han tomado acciones para acondicionarla. Alejandro Echenique, taxista de la zona, explicó que la vialidad tiene unos 12 años sumida en la desidia.
“Aquí ha venido todo el mundo, tanto de oposición como del oficialismo, y parece que pasan con los ojos cerrados. Mientras tanto, nosotros que prestamos el servicio de carritos por puesto estamos pasando trabajo, ya que a cada rato se nos dañan los vehículos”.
Recordó que hace unos años, un grupo de trabajadores de la Gobernación de Miranda atendía la vía con desmalezamiento, pero “desde un tiempo para acá dejaron de hacerlo, y ahora el deterioro es más severo”. Por otra parte, Dennis Alfonso Jiménez informó que desconoce si se ha llevado a cabo alguna labor por solicitar ayuda a los entes regionales, pero el daño es algo que está a simple vista.
“La vía es bastante concurrida cuando se suscita algún percance en la carretera Tácata-Cúa. La gente usa esta como escape, ya es hora de que le metan mano”. Pablo Reina subrayó que durante los primeros años de gobierno de Henrique Capriles esta recibía mantenimiento; no obstante, presume que debido a que al mandatario le quitaron algunas funciones, esto dejó de hacerse.
“El agua se lo llevó”
A pesar de que Elías Jaua, presidente de Corpomiranda, hace unos meses ejecutó un proyecto de rehabilitación de la carretera Tácata-Cúa, donde aplicaron asfalto a lo largo de aproximadamente 13 kilómetros, y hasta entregaron unidades de transporte masivo, el agua se lo llevó todo. Motivado al crecimiento de una quebrada que arrastró consigo desperdicios y piedras, un gran tramo de la vía que conduce hacia Cúa se desplomó, originando una falla de borde que mantiene en alerta a los vecinos.
Efrén Medina, lugareño, relató que el hecho ocurrió aproximadamente hace dos años, y hasta ahora no ha recibido respuesta por parte de nadie. “Por debajo hay una canal que se tapó, por eso el líquido se empozó, se debilitó el terreno y posteriormente se desbarrancó”. Mencionó que el asfaltado ha ido desapareciendo de forma gradual.
Recalcó que por este tramo circula carga pesada, además de que es la vía principal de salida del pueblo, usada por los habitantes para ir a trabajar. “Tienen que realizar un trabajo más a fondo desviando el río, ya que cada vez que crece causa estragos”.
Ambas vías son competencia de la Gobernación
El presidente de la Comisión de Vialidad y Transporte del Concejo de Guaicaipuro, Manuel Almenar, recalcó que la responsabilidad de estas vías recae directamente en la Gobernación. “Ante el deterioro de las carreteras Paracotos-Tácata y Tácata-Cúa, el Alcalde solicitó ante el Consejo Estadal de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas (Ceplacopp), que el Gobernador invirtiera unos Bs. 9.000 millones en conjunto con los consejos comunales para acondicionar estas vías”.
Por otra parte, subrayó que la Cámara y la Alcaldía aprobaron un proyecto de vialidad rural al consejo comunal del sector El Onoto de Tácata, para recuperar las calles internas de la parroquia. Igualmente, se les dio luz verde a recursos para ser invertidos en vialidad a los consejos comunales de Cocorote, de San Diego de los Altos; y La Mata, en Altagracia de la Montaña./Yordys Méndez/ac/Foto: Gioersy Mendoza