Dos menores y tres adultos permanecen en el PMOM desde el sábado. Hoy serán presentados en los tribunales
Ronald Peñaranda. “ A mi hijo lo golpearon salvajemente por la cabeza con un casco y luego le apuntaron con un fusil. Me dijo mamá sácame de aquí rápido antes de que me hagan mas daño”. Así lo relató la madre de uno de los cinco muchachos- dos menores y tres adultos- que fueron detenidos el sábado por efectivos de la Guardia del Pueblo (GP) en la avenida Perimetral de San Antonio de los Altos.
Con lágrimas en los ojos la mujer, quien pidió que no publicáramos su nombre por temor a represalias, señaló que su hijo- de 20 años que trabaja con su padre como electricista- junto otros cuatro menores permanecen en el comando de la GP ubicado en las instalaciones del Liceo Militar Pedro María Ochoa (PMOM).
Dijo que ayer los padres y representantes lograron entrar y hablar con los jóvenes casi 30 minutos. “Todos señalaron que cada vez que los militares cambian de guardia los patean con los botas. Les dieron por las costillas y los dejaron sin aire”.
Expresó su preocupación porque les informaron que permanecerán allí hasta que sean presentados al Ministerio Público y los Tribunales. “Los están acusando de guarimberos. En el caso de mi hijo no estaba colocando barricadas ni generando hechos de violencia. Lo detuvieron cuando entraba a una panadería”. El edil Héctor Medina, presidente de la comisión de Derechos Humanos de la Cámara Municipal de Los Salias, declaró que una vez que se produjo la aprehensión se puso en contacto con una funcionaria de la Defensoría del Pueblo de Miranda a quien alertó sobre el riesgo que corrían los chamos al ser llevados al PMOM. “Ya hay antecedentes de la violación de derechos humanos en ese recinto. Así se evidenció con los 42 que fueron detenidos en la protesta que se escenificó en la recta de Las Minas el pasado mes de febrero”.
Subrayó que los guardias los despojan de sus pertenencias. “Les quitan los celulares y luego nos se los regresan en pocas palabras los roban”. Añadió que los efectivos arrastran en el piso a los aprehendidos “para hacerlos pasar como guarimberos y lo cierto es que todos ellos fueron agarrados lejos donde montaron las barricadas. Este mismo modos operandi lo aplicaron con otro que atraparon en La Rosaleda el 5 de marzo, por eso no le tenemos confianza a la Guardia del Pueblo”. Tirso Flores, presidente del Concejo, criticó que las autoridades de la Guardia del Pueblo hayan impedido el acceso a los abogados encargados del caso.
Precisó que llama la atención que a todo los que han atrapado en las protestas en San Antonio les hayan otorgado libertad plena, “es decir que no encuentran pruebas de que hayan cometido delito. Esto nos hace ratificar la tesis de que la violencia es generada por gente del Gobierno para incriminar a la oposición”./Foto: Felix Laucho