Una de las principales coyunturas con las que deben coexistir los pobladores de El Vigía, es el tema del transporte. Desde hace varios años la línea que opera en el sector, se ha ido deteriorando y con el tiempo son menos las unidades que prestan el servicio.
“Los ciudadanos somos los perjudicados, debemos caminar o buscar otras alternativas de transporte. Se supone que hay 7 busetas para una población que con los años ha ido creciendo. Algunos conductores dicen que es por la falta de repuestos y porque la proveeduría no les proporciona los insumos con tanta frecuencia, pero con lo caro que cobran deberían tener para costear el mantenimiento de su medio de trabajo”, argumenta Dulce Monasterios.
Se pudo conocer que la tarifa que están cobrando es de Bs. 150 de lunes a viernes y los fines de semana Bs. 170. No obstante, eso no se ve reflejado en el buen servicio ni en el óptimo estado de las unidades.
“Muchas veces se quedan accidentadas en el camino o tardan demasiado en pasar. Salir de aquí o retornar a nuestros hogares es un suplicio, sobre todo en horas pico porque las pocas que funcionan están colapsadas”, alega Monasterios.
Manifestaron que en reiteradas ocasiones han denunciado que el servicio es defectuoso, pero no han sido escuchados por los directivos. “El problema persiste y más bien se agrava”, concluye una ciudadana que prefirió mantenerse en anonimato./lb/Foto: Víctor Useche/