Los pacientes se quejan porque el baño de hombres está cerrado y el de mujeres no tiene puertas, además de que la pestilencia impregna la sala de emergencias. Este sábado no hubo insumos y seis médicos no se dieron abasto para la gran cantidad de casos

De crítica califican los doctores de la emergencia del Victorino Santaella la situación con los insumos. “Estamos mal, muchos de los pacientes tienen que traer vendas, gasas y algunas medicinas para poderlos atender”, expresa un médico de guardia, que por razones de seguridad no detalla su nombre. Sostiene que apenas seis colegas laboran los fines de semana, entre especialistas y rurales, y los padecimientos más comúnes son afecciones respiratorias, crisis hipertensivas, infartos y ACV. “En media mañana pueden llegar hasta 40 casos”. Rosa Sánchez, familiar de un paciente, afirma que la atención fue rápida. La única queja es que al momento de ingresar el doctor se molestó porque estaba en su hora de descanso. Por su parte, Magali Parra denuncia que el área se encuentra llena de basura y los perros se la pasan en la sala de espera.

Noraima Méndez añade que los baños están en pésimo estado. “El de las mujeres no tiene puertas y la hediondez es horrible, mientras que el de los hombres lo tienen cerrado”. Asimismo, María Rodríguez detalla que ambos sanitarios fueron remodelados hace un año y ya están destrozados. “La gente es muy inconsciente y cochina”./Andreina Ochoa/ac/Foto: Andreina Alemán