Los de Conte podrían proclamarse matemáticamente campeones de la Premier el próximo viernes si consiguen la victoria el próximo viernes ante el West Bromwich Albion.
El partido fue plácido de cabo a rabo para los ‘blues’ a pesar de que el rival se jugaba la vida. La calidad hizo justicia y, desde el principio, el Chelsea tomó las riendas.
Con Fàbregas y Marcos Alonso especialmente activos (el primero dio dos asistencias y el segundo marcó y estrelló un balón en el larguero), los londinenses supieron tener paciencia para abrir la lata.
El marcador lo inauguró Diego Costa tras una buena asistencia de Cesc. El punta batió a Guzan con un caño, mismo método que se repetiría en la totalidad de los tantos.
El propio Alonso haría el segundo a los 34 minutos. Apenas sin ángulo, el defensa intentó el disparo y Guzan hizo el resto, tras ver cómo se colaba el balón entre sus piernas y ayudando con la pantorilla a que el balón besase la red.
El ‘Boro’, desaparecido ante el dominio en la segunda mitad
Los visitantes parece que aceptaron su cruel destino sin más en el descanso. La segunda mitad fue un monólogo local. Se divertían los de Conte mientras veían pasar un reloj que les acerca al título.
Matic haría el tercer y definitivo gol del partido tras otro magistral pase de Fàbregas para cerrar la goleada y certificar el descenso del Middlesbrough.
El Chelsea podrá proclamarse campeón de la Premier si obtiene el triunfo ante el WBA en The Hawthorns, independientemente de lo que haga el Tottenham, su perseguidor.
Fuente: BeSoccer