31/05/16 -. Lo primero que te recomendamos que hagas es que investigues un poco sobre la cultura de la empresa y su código de vestuario para que tengas una mejor idea de cuál es la imagen que buscan.
Ahora bien, no se trata de ir disfrazada de algo que no eres sino de transmitir profesionalidad, así que utiliza ropa con la que te sientas cómoda y des la impresión de ser apta para que te contraten.
Para eso, recurre a prendas de colores neutros como negro, blanco, gris, azul y beige. Y que nunca revelen más de lo que deberían; olvídate de los escotes, las faldas cortas y las camisas sin mangas.
Pero la ropa no lo es todo. Asegúrate de ir a la entrevista de trabajo con los accesorios acordes. La joyería no debe ser muy llamativa: con unos zarcillos, tu reloj y un par de anillos estarás bien. En cuanto a tu cartera, lleva un bolso discreto de tamaño medio y con asas.
También es importante hacer una buena elección con los zapatos. Es mejor que acudas a tu entrevista con unos cerrados. Las sandalias puedes usarlas otro día. Y recuerda hacer que tus medias combinen con tu pantalón o falda, parece una tontería pero no lo es.
Otros aspectos que debes cuidar son tus uñas, cabello y maquillaje. Tu manicura debe reflejar unas uñas limpias y bien cuidadas; usa un brillo o algún color pastel. Tu cabello debe estar bien peinado, que no parezca que acabas de levantarte ni bajarte de una montaña rusa.
Último consejo: no exageres con el maquillaje. Intenta lucir natural y emplear colores suaves que resalten tu belleza. Sabemos que no se trata de una cita, pero igual trata de verte linda, con un look fresco.
con información de EME
