Una corte internacional especializada en asuntos de derechos humanos analiza durante las jornadas de miércoles y jueves el llamado caso Beatriz, cuyo objeto es la cuestión del aborto en El Salvador, país donde está absolutamente prohibido y es penalizado.
Beatriz era una paciente de lupus e insuficiencia renal a quien en 2013 se le impidió interrumpir su embarazo, a pesar de que un comité médico ya había concluido que esa era la salida más adecuada para su salud.
La corte recibe “alegatos y observaciones finales orales sobre el fondo y eventuales reparaciones y costas” de este caso, para lo cual escuchará las declaraciones de 42 personas, entre presuntas víctimas, testigos y peritos, propuestos tanto por la parte demandante como por el Estado salvadoreño.