El exceso de sol, el clima extremo puede provocar dermatitis, envejecimiento prematuro y cáncer
La piel es el órgano más grande del cuerpo, es el traje que recubre al organismo y lo protege de las lesiones causadas por factores externos como bacterias, sustancias químicas, aguas contaminadas, exceso de sol, temperaturas extremas (calor, frío), y lluvia, entre otros.
Por todo ello, los especialistas insisten en que es necesario cuidar la piel con una buena higiene, protectores solares, ingesta de agua y una vestimenta adecuada al tipo de clima, con el fin de prevenir daños y enfermedades causados por agentes naturales o artificiales.
La dermatóloga, María Wan Der Biest, afirmó que “también es muy importante hacer un chequeo médico ante cualquier cambio que se observe en la piel”.
Los estudios médicos que deben realizarse dependen del estado de salud de la piel, y “deben realizarse mínimo dos veces al año, para evaluar el estado general de la piel y evaluar las lesiones que no cicatrizan, o aquellas lesiones que cambien de color o de tamaño, así como manchas y lunares, ya que todas esas lesiones pudiesen ser cancerígenas”, explicó la doctora, quien ejerce profesionalmente en el Grupo Médico Santa Paula.
Aclaró que, en el caso de que un paciente tenga una patología en la piel, debe establecerse un control más seguido.
La especialista en dermatología del GMSP recomendó que es muy importante lograr una buena protección contra los rayos UV (entre ellos UVA y UVB) del sol, y para hacerlo correctamente “es vital seleccionar un bloqueador adecuado a las actividades a realizar, porque de ello depende la efectividad del producto”.
Para mejorar el aspecto de la piel, la doctora insistió en que “lo mejor es asistir primero a consulta con el dermatólogo, para que este determine cuál es tu tipo de piel y así lograr los cuidados y la alimentación más favorable para la salud del tipo de piel que se tenga”./ct