03/08/15.- La Alcaldía de Guaicaipuro decretó en diciembre de 2013 la prohibición del expendio de productos básicos por parte de comerciantes informales y vendedores de mercados a cielo abierto.

Entre los rubros destacan: harinas precocida y de trigo, azúcar, aceite, café, arroz, sal, pasta, leche en polvo o pausterizada, salsa de tomate, mayonesa, queso, atún, sardinas, mantequilla, margarina, compotas, carne, pollo y pescado.

También el decreto establece que no será permitida la venta de productos de aseo personal como desodorante, toallas sanitarias, jabón de baño, champú, enjuague para el cabello, crema dental, máquina de afeitar, papel higiénico y pañales.

Asimismo, artículos de limpieza como jabón de panela, detergente para la ropa, lavaplato, desinfectantes, cloro y cera para pisos.

El artículo 2 del instrumento legal indica que los infractores se exponen a la pérdida del permiso y de la autorización para el expendio en la calle, así como al decomiso de la mercancía.

El artículo 4 dice que los encargados de hacer respetar el decreto son la Guardia Nacional Bolivariana, Guardia del Pueblo y Poliguaicaipuro.

A principios de este año, fue juramentada en la Cámara la Comisión de Defensa de los Derechos Socioeconómicos del Pueblo. Quedó integrada por los concejales Rafael Ortegano (presidente), Ramón Madriz (vicepresidente) y Jean Silva (vocal).

Pese a estas medidas que fueron creadas a nivel local, más las otras leyes nacionales que existen, los revendedores y especuladores actúan a sus anchas en cualquier rincón de la ciudad.

“Las funciones de la comisión son limitadas porque el único organismo que tiene la potestad de sancionar es la Sundde. Hacemos inspecciones y procesamos denuncias que luego remitimos a la Superintendencia de Precios Justos”, declaró el edil Ortegano.

“Gente del pueblo se presta para la guerra económica”

Explicó que la mayoría de las quejas que recibe está relacionada con sobreprecios y acaparamiento.

Lamentó que mucha gente del pueblo, como bodegueros, “se está prestando para la guerra económica. No sabemos si lo hacen consciente o inconscientemente”.

“Esto se ha convertido en una espiral en la que todo el mundo quiere lucrarse, sacar ganancias y no saben que el gran daño no los estamos haciendo nosotros mismos como país. Situaciones como estas nos pueden conducir a cosas que no queremos, como el enfrentamiento de pueblo contra pueblo”.

Sobre los bachaqueros, dijo que “hay bandas organizadas que se dedican a esa clase de actividad y violan las leyes, impidiéndole a los demás tener acceso a los productos. No les importa venderlos a precios exorbitantes”.

También propuso que los cuerpos de seguridad apliquen mano dura para hacer valer el decreto que prohíbe a los buhoneros expender artículos de primera necesidad.

“Hay situaciones en las que nuestras autoridades se han frenado a la hora de actuar. Algunos funcionarios hacen como el avestruz, que mete la cabeza”.

Por: Ronald Peñarand/Foto: Abraham Gutiérrez