Ángel Heredia fue detenido por el homicidio del hijo del basquetbolista Juan Manaure
El sujeto había sido señalado, tras investigaciones exhaustivas del Cicpc y de la Unidad Anti Extorsión y Secuestros del Ministerio Público, como uno de los implicados en el secuestro del hijo del basquetbolista Juan Manaure, exjugador de los Cangrejeros de Monagas.
Cuando la comisión lo capturó, el sujeto tenía puestos los zapatos del adolescente, evidencia de que sí era el hombre que buscaban.
Efectivamente, el detenido confesó haber participado en el hecho y dijo, además, el lugar dónde lo habían asesinado y enterrado, según reseñó El Universal.
Se trata del caserío Oruza, ubicado en el mismo sector de Chuspita, a orillas de la vía con sentido hacia Caucagua.
Fue en horas de la tarde, en presencia de la comisión del Cicpc y del MP, cuando desenterraron el cadáver que estaba a metro y medio de profundidad, según datos aportados por fuentes policiales.
Al sujeto también le incautaron una escopeta, que será analizada en detalle pues presumen que fue con esa misma arma que le dieron muerte al adolescente.
Los restos fueron reconocidos de inmediato por la vestimenta. Presentaba un disparo de escopeta en el cuello.
Funcionarios del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) hicieron el levantamiento de los restos y los enviaron directamente a la morgue de Bello Monte, adonde fueron ingresados en horas de la madrugada de ayer.
Un médico forense detalló que por las condiciones del terreno donde hallaron el cuerpo, aún tenía tejidos musculares. Sin embargo, por el avanzado estado de descomposición es necesario practicar pruebas especiales para determinar la identidad de la víctima.
Es por ello, que en la morgue de Bello Monte tomaron muestras para la comparación del ADN con el de su madre, pues con ella existe la probabilidad de 100% de coincidencia.
Familiares del basquetbolista acudieron ayer a la medicatura forense, pero no quisieron ofrecer ningún tipo de declaraciones a los medios.
Habló el Ministerio Público
El director nacional contra la Extorsión y el Secuestro del Ministerio Público, Carlos Almarza, confirmó todo el procedimiento y dijo que desde que ocurrió el secuestro del jovencito, el 23 de diciembre pasado en San Agustín del Sur, su dependencia estuvo dedicada a la investigación.
De hecho, dijo que lograron determinar la responsabilidad en el delito de varios sujetos que permanecen privados de libertad en los penales de Tocorón y Tocuyito.
Incluso, el Cicpc lo había anunciado a principios de enero de este año, cuando detuvieron a una mujer y dos hombres señalados de participar en el plagio. Los tres permanecen encarcelados: ella en el INOF y ellos en el 26 de Julio en el estado Guárico.
Otros cuatro reclusos fueron asesinados en esos penales, pues tenían vinculación con la banda que se llevó al hijo del deportista.
La conexión carcelaria que se dedica al secuestro
Para los funcionarios del Cicpc no fue difícil determinar que la planificación del secuestro del hijo del deportista salió de la cárcel de Tocorón.
Una vez que el adolescente fue secuestrado el 23 de diciembre pasado, los delincuentes tuvieron tres comunicaciones telefónicas con Juan Manaure para solicitarle una fuerte suma de dinero en dólares y así concretar su liberación.
Desde ese momento y tras la denuncia del hecho, se iniciaron investigaciones por parte de comisiones del Cicpc y del Ministerio Público.
A través del análisis telefónico y rastreo de líneas, los efectivos llegaron hasta Jean Carlos Bandris Palomo, Mario Alejandro Vaamonde Lovera y Leida Solangel Mendoza Castro.
Fueron detenidos a principios de enero. No dijeron dónde, pero la mujer tenía relación directa con un recluso de la cárcel de Tocorón, apodado “el Oso”, quien era su pareja.
Como ella era muy cercana a la familia del deportista (se dijo que era prima), confesó haber aportado información para concretar el secuestro.
Al ser presentados e imputados por los delitos de secuestro y asociación para delinquir, fueron enviados a penales. Ella para el INOF y los hombres al 26 de Julio en Guárico.
Luego, otros cuatro reclusos miembros de la misma banda dedicada a planificar secuestros, fueron asesinados en Tocorón y Tocuyito respectivamente. Esta información fue verificada por el Ministerio Público. La banda tiene tentáculos en varios penales.