La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, confirmó la detención, que calificó de “una gran victoria para el Estado” y que demuestra que “el Estado no se rinde ante la mafia”.
Meloni destacó que el arresto se produjo el día después del aniversario de la detención hace 30 años de Totó Riina, otro jefe del crimen organizado. Y agradeció a “las fuerzas policiales y, en particular, a los Carabineros, a la Fiscalía Nacional Antimafia y a la Fiscalía de Palermo por la captura del máximo exponente de la delincuencia mafiosa”.
El jefe de Cosa Nostra, la mafia siciliana padecía cáncer de colon y tenía metástasis en el hígado por las que se sometía a ciclos periódicos de tratamientos de quimioterapia, para lo cual usaba supuestamente el apellido Bonafede, indicaron fuentes de la clínica.
Cuando fue detenido, no estaba postrado en cama, sino sometiéndose a sus exámenes médicos.