La Guardia Civil ha detenido este martes en el aeropuerto de Sevilla con 39 kilos de cocaína a un militar miembro de la tripulación de uno de los aviones de la Fuerza Aérea Brasileña que utiliza el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, para sus desplazamientos internacionales, según han confirmado a EL PAÍS fuentes de la Guardia Civil.
El arresto se produjo cuando la aeronave hizo escala sobre las dos de la tarde en el aeródromo de la capital andaluza rumbo a Osaka para servir de avión de reserva al mandatario brasileño que viaja en otro aparato para participar en la reunión del G-20 que se celebra en la capital japonesa. El Ministerio de Defensa de Brasil ha emitido una nota en la que confirma el arresto del militar por tráfico de estupefacientes. Bolsonaro también ha lanzado un tuit en el que confirma el suceso. El titular del Juzgado de Instrucción 11 de Sevilla ha ordenado este miércoles el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del detenido acusado de un delito contra la salud pública.
Fuentes de la Guardia Civil detallan que la detección de la droga y el posterior arresto del militar se produjo cuando la veintena de militares que forman parte de la tripulación y sus equipajes pasaron el preceptivo control aduanero a su llegada al aeropuerto de Sevilla. El ahora detenido, un suboficial de 38 años de edad cuya identidad no ha sido facilitada, había descendido del avión con un portatrajes y una maleta de mano. Cuando los agentes españoles registraron esta última, descubrieron que iba repleta con 37 paquetes de algo más de un kilo cada uno cuyo contenido resultó ser cocaína. “Ni siquiera estaban camuflados entre ropa”, destacan fuentes del instituto armado.