Chamos de varias comunidades de Guaicaipuro disfrutaron de un fin de semana diferente y divertido
Más de 170 niños de bajos recursos disfrutaron este domingo de la llegada de la Navidad. En un parque improvisado en plena avenida Bertorelli Cisneros, de la ciudad de Los Teques, pequeñines de Guaremal, El Nacional, Barrio Unión, Barrio Miranda y Túnel 10, fueron homenajeados, a propósito del nacimiento del Niño Dios.
“Estamos muy contentos de llevar alegría a esos seres que iluminan el día a día de de todos nosotros. Sabemos que ser niño es una bendición y no hay nada más bonito que disfrutar de la infancia”, dijo Janeth García, líder del equipo organizador de las actividades.
Además de divertirse con pintacaritas, shows en vivo, colchones inflables y de disfrutar de dulces y tortas de toda clase, a los chiquitines también se les brindó un mega almuerzo. “Queremos que se sientan bien y que disfruten. Nos organizamos un grupo de 8 personas, que tocando puertas y recolectando de aquí y de allá, quiso ayudar con lo que cada uno de nosotros pudo y con lo que cada amigo contribuyó”, agregó García.
Entre los pequeños que asistieron a la jornada, que de una u otra forma ayudó a despejar sus mentes, hay casos de menores en situación de calle, por lo que “el compromiso asumido es cada vez más alto”.
“Mucho o poco, la diferencia está en hacer el bien sin mirar a qué dirección. Somos un gran hormiguero y si cada uno de nosotros colabora y se anima a ayudar, vamos a cambiar realidades de muchas de estas hermosas criaturas”, subrayó.
Los protagonistas
“Estamos muy agradecidos por lo que están haciendo por nosotros y pedimos a Dios que los cuide siempre para que cuando yo ya sea grande, haya oportunidad para ayudar a otros niños como yo”, dijo Yeiker Linares, uno de los jovencitos.
Otro de los chamos que asistió desde Guaremal hasta Los Teques para el compartir, dijo: Muchas gracias y ojalá haya personas como ellos que hagan lo mismo con otros niños de otras partes de Venezuela.
Además de agradecer por la oportunidad de compartir y de sentir una vez lo que es ser los reyes de la casa, los chamitos estuvieron pendientes de pedir al Hijo de Dios por la felicidad de otros.
“Estoy alegre y muy contenta por lo que estoy viviendo hoy y junto a los demás niños hicimos una oración para que cosas bonitas también le pasen a otros niños que como nosotros”, dijo Norelkis Villa.
“Gracias a quienes colaboraron e hicieron esto posible. Que Dios bendiga a su familias y ojalá que en sus casas nunca les falte nada, amén”, oró Stefany Gudiño.
Seguir ayudando
Según lo que aseguró parte del comité de organización, esperan seguir con las actividades en los próximos años, por lo que hacen un exhorto a quienes se quieran unir a la causa, para que lo hagan y den felicidad a quienes más la necesitan.
“Ojalá se nos una más gente y podamos llevar esta actividad a todos los rincones del municipio y del estados. estamos agradecidos con quienes nos ayudaron y esperamos contar con ellos en un futuro”, precisó una de las colaboradoras. “Si no se puede de nuevo antes del 31 de diciembre, vamos a luchar para lograr que se haga el otro año”, aseguró.