El mayor peligro lo corren las mayores de 35 años. El consumo de drogas puede ocasionar malformaciones en el embrión
Los embarazos de alto riesgo representan un considerable peligro tanto para la mujer como para el feto, por lo cual especialistas aseguran que la vigilancia médica juega un papel fundamental para un desenlace satisfactorio. Son muchos los factores que influyen en este tipo de embarazos, siendo los principales o más comunes, la edad, las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), las adicciones (drogadicción, alcoholismo y tabaquismo), algunas enfermedades (hepatitis, diabetes, obesidad mórbida, anemia) y la presencia de un historial de abortos. Para esta ocasión se pudo conversar con la doctora Alba Arellano, ginecobstetra de la Policlínica El Retiro, quien afirmó que si se monitorea de forma pertinente la gestación, hay altas posibilidades de que el final sea positivo, aun si en el proceso hubo riesgos.
La edad
Se consideran peligrosos los embarazos en menores de 18 años y en mayores de 35. Arellano aseguró que estos últimos son los que requieren más cuidado; mientras que en el caso de las adolescentes, todo dependerá del desarrollo de su cuerpo; sin embargo, no deja de ser una cuestión de cuidado. Agregó que los controles deben realizarse cada 15 días y se deben efectuar ecografías Doppler, que permiten obtener información referente al movimiento y la velocidad de los fluidos del embrión, los cuales no pueden ser apreciados en una ecografía normal.
Infecciones de Transmisión Sexual
Las ITS representan uno de los aspectos más delicados en lo que a embarazos riesgosos se refiere. Una mujer portadora de una infección puede contagiar antes, durante o después del parto a su bebé. Otros problemas que pueden surgir a raíz de esto son el aborto espontáneo, el adelantamiento del parto y la rotura de las membranas que cubren al bebé en el útero, lo que también puede devenir en un nacimiento prematuro. Resulta de suma importancia que las féminas en estado soliciten a su médico efectuarles pruebas de detección de ITS, ya que muchos especialistas suelen omitir este procedimiento, y además algunos de estos padecimientos pueden estar presentes sin ocasionar síntomas.
Drogas, alcohol y tabaco
El uso prolongado de tabaco, alcohol y drogas durante el período de gestación puede traer algunas consecuencias para el bebé. El consumo de cualquier droga aumenta el riesgo de malformaciones congénitas, de restricción, de crecimiento intrauterino y de daños al embrión. Considerando que la adicción a una droga puede ir acompañada por otras, resulta algo complicado para los especialistas medir el nivel de daño que se causará al feto, ya que en la mayoría de los casos no se puede determinar la cantidad de sustancias estupefacientes que ingirió una madre adicta durante su preñez.
Otras condiciones médicas
Las enfermedades que necesitan de mayor cuidado durante la gestación son la anemia, la hepatitis, la obesidad mórbida, la diabetes y la toxoplasmosis. Es función del especialista a cargo del monitoreo del embarazo tomar las acciones pertinentes e idear un cronograma de actividades y consultas a llevar a cabo por la fémina.
Cuidados
Muchas veces los embarazos riesgosos requieren de estudios especializados, manifestó Arellano, quien agregó que algunos centros de salud públicos en los Altos Mirandinos no cuentan con los equipos necesarios para realizar estas pruebas, y que en los recintos privados ofrecen precios asequibles. “En el Victorino Santaella hay especialistas muy buenos, pero no tienen los recursos para algunos exámenes”. Precisó que 30% de los embarazos que atiende durante el año son de alto riesgo y con la atención pertinente la gran mayoría culmina bien.
Prevención del embarazo precoz
A continuación se plantean algunas medidas posibles para prevenir el embarazo no deseado:
- Buena relación de los adolescentes con sus padres.
- Hablar abiertamente de sexo.
- Una correcta educación sexual.
- Considerar el aborto como la última alternativa ante el embarazo.