Aseguran que les deben más de tres meses de salario
A las 8:00 pm del viernes, las pocas enfermeras que estaban de guardia en la emergencia del Victorino Santaella paralizaron sus actividades y decidieron no laborar más. La denuncia corresponde a los usuarios que fueron encuestados durante la mañana de ayer, acerca del funcionamiento del principal centro de salud de la capital mirandina.
Según explicó Yuli Soto, acompañante de un paciente, las profesionales dijeron que tomaron esa decisión debido a que se les adeuda más de tres meses de salario y porque el déficit de personal se ha vuelto insostenible. “Una de ellas me indicó que en la noche deben redoblar los turnos y el viernes solo laboraron tres para toda el área”.
Por otro lado, señaló que el servicio va de mal en peor, pues nunca hay insumos y no te dan información sobre estado de salud de tu familiar. “Para que pudieran atender a mi hijo, que presenta fractura en la tibia, me tocó comprar unos alambres que le tienen que colocar en la rodilla, y los CD para que le hicieran las placas”. “La situación es deprimente. A mi chamo le colocó el tratamiento una doctora como a las 12:00 de la noche, luego de más de tres horas de espera”.
Exigen mayor seguridad
Una de las trabajadoras, que por temor a represalias no quiso identificarse, señaló que no cuentan con ningún tipo de seguridad en los pisos altos. Al informarle que ya hay 13 cámaras para resguardar el lugar, replicó que ella no las ha visto. “¿Dónde las instalaron? ¿Tú estás segura?, porque el hampa sigue desbordada en las adyacencias y adentro”.
A juicio de Betty Pumero, usuaria, al menos en la emergencia se observa un número mayor de vigilantes. “Realmente están haciendo un buen trabajo, lo que no comparto es el horario de visitas. Mi hija está en cuidados intensivo en el piso 2 por una subida de tensión y hay parientes que vienen de lejos y no la han podido ver”.
Lesli Alcalá hizo énfasis en que por las noches es necesario incrementar el personal de vigilancia. Relató que hasta las 10:00 am de la mañana de ayer, su hija se encontraba a la espera de un neonatólogo para que la pudieran ingresar y que diera a luz. “No me he visto en la obligación de comprar ningún insumo”./ac