Miles de trabajadores podrían quedar en la calle por cierre de empresas

Claudio Vargas. El índice de desempleo cada vez es más en alto en el país, en vista de que la mayoría de las empresas funciona a lo mínimo de su capacidad por no contar con materia prima. Así lo dio a conocer Nelson Puchi, presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales de Miranda (Capmi).

Indicó que las compañías ya disminuyeron la contratación de personal. “La escasez de insumos ha puesto en jaque a todas las empresas. También la Ley de Inamovilidad Laboral se ha convertido en una traba hasta para los mismos trabajadores porque se les dificulta conseguir empleo”.

Manifestó que las herramientas que utiliza el Ejecutivo nacional para aliviar la crisis económica no están dando los resultados esperados. “El Sicad I y II no sirven de mucho. Lo que se necesita son soluciones que generen bienestar y no más desabastecimiento”.

En tanto, Bernardo Calvo, representante de la Cámara de Comercio de Los Salias, advirtió que el Estado tiene que suministrar las divisas al sector antes de que sea demasiado tarde. “Si la asignación no llega lo más pronto posible, los empleos se habrán perdido y las empresas habrán dejado de funcionar. Lo más grave es que cerrarían masiva y conjuntamente”.

Destacó que las consecuencias serían nefastas. “Lo primero es que la gente va a pasar hambre porque no tendría con qué pagar los alimentos. Luego se incrementará la delincuencia. Al final podríamos acabar en un absoluto comunismo, en el cual el Estado nos domine a través del estómago”.

Aún hay esperanzas

“Las empresas tienen la esperanza de que el Gobierno pague las deudas, y de esta manera se reactive la economía; sin embargo, no sabemos cuándo pueda ocurrir esto. Lo que sí está claro es que los empresarios no resistirán nuevamente que el Estado dure ocho meses para liquidarles las divisas”, sostuvo Calvo. Por último, le hizo un llamado al Ejecutivo nacional para que movilice la asignación de dólares. “Esperemos que dejen de disfrazar el retraso con promesas de diálogo. Aquí no hay nada que hablar, lo que se necesita es que paguen”./ac