La esposa del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, Marisa Leticia Rocco, permanece en coma inducido en el hospital al que ingresó este martes tras sufrir un derrame cerebral, informaron hoy fuentes cercanas al político.
Eduardo Suplicy, exsenador del Partido de los Trabajadores (PT), visitó hoy a Lula en el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo y dijo a periodistas que la situación de Rocco “es delicada” y que el exjefe de Estado le comentó que “es necesario rezar” por su recuperación, informó Efe.
El médico Roberto Kalil Filho, que atiende a Lula y su familia desde hace años, explicó este que Rocco fue sometida a un cateterismo cuando ingresó al hospital, con el objetivo de contener la hemorragia cerebral.
En un boletín, el Hospital Sirio Libanés informó de que hoy le fue realizada una tomografía craneal para verificar el resultado y que la esposa de Lula permanecerá sedada durante un período que aún no ha sido determinado.
Según Suplicy, “Lula está preocupado y dijo que precisamos darle apoyo y, principalmente, rezar, porque cuando hay un cuadro como ese en el cerebro, se puede pasar mucho tiempo sin vivir normalmente”.
Sin embargo, apuntó que Lula se mostró “esperanzado” en la pronta recuperación de su esposa, que en palabras del exsenador “ha sido siempre un pilar fundamental” para el exmandatario.
Lula y Rocco contrajeron matrimonio en 1973, cuando ambos eran viudos, tras un romance de siete meses.
En los últimos meses, la justicia ha abierto cinco causas penales contra Lula por asuntos de supuesta corrupción, y en tres de ellas su esposa ha sido incluida entre los acusados.
A pesar de su delicada situación jurídica, Lula, quien gobernó Brasil entre 2003 y 2010, ha insinuado más de una vez que pudiera postular para un tercer período presidencial en las elecciones que se celebrarán en 2018.
Fuente: El Universal