Un bote de aguas residuales lleva más de tres meses esparciéndose por toda la calle Revolución, de La Matica, causando daños en el pavimento al estancarse en los huecos.
“El olor que emana del lugar es bastante putrefacto. Por acá viven niños y personas de la tercera edad nos preocupa que puedan contraer enfermedades ya que son los más vulnerables“, apuntó Judith Toro, vecina de la zona.
Declaró que en múltiples ocasiones han hecho los llamados pertinentes pero aun no hacen caso a sus reclamos ´´ ya no sabemos que hacer para que se quite por completo esta situación que nos atormenta como comunidad“.
Dijo que la situación es persistente debido a que el desemboque del tubo lo suelen tapar con basura personas de otras calles “debemos tomar conciencia, hasta los motorizados han tenido que levantar sus pies para no ensuciarse de agua podrida, otro como yo evitamos pasar por ahí”. /HM/at