El Chelsea desaprovechó su mejor fútbol y empató 2-2 ante el Tottenham en un derby volcánico que empató Harry Kane en el minuto 96 y que terminó con los técnicos Thomas Tuchel y Antonio Conte a un paso de llegar a las manos tras la conclusión del duelo.
Sin duda, el Tottenham fue el ganador moral. Siempre por detrás en el marcador, a rebufo de la buena propuesta del Chelsea, convirtió su calvario en una supervivencia que parecía imposible.