En una noche para el olvido, el Inter Miami de Lionel Messi sufrió una contundente derrota 5-3 como local frente al Chicago Fire en la MLS, complicando su objetivo de liderar la temporada regular.
El encuentro, disputado el martes en el Chase Stadium, evidenció la fragilidad defensiva del equipo y el desgaste tras seis partidos en 17 días, motivados por su preparación para el Mundial de Clubes 2025.
Los dirigidos por Javier Mascherano se fueron al descanso 3-1 abajo. Luis Suárez encendió la remontada con un doblete (minutos 60 y 74), empatando transitoriamente, pero el Chicago Fire capitalizó los errores defensivos.
Justin Reynolds devolvió la ventaja en el 80, y Brian Gutiérrez selló el 5-3 con un golazo desde fuera del área en el 83.
Messi, máximo goleador de la MLS con 24 tantos en 25 partidos, se fue en blanco por segundo juego seguido, estrellando un balón en el poste. Mascherano, quien realizó tres cambios al medio tiempo, asumió la responsabilidad: “No supimos cerrar el partido. La culpa es mía por no ajustar mejor”.
La fatiga del equipo, con 10 goles encajados en los últimos tres juegos, y la falta de solidez defensiva fueron claves en el tropiezo. Con 53 puntos, Inter Miami (segundo en el Este) ve peligrar el liderato frente al Columbus Crew (56 puntos). El próximo duelo ante Charlotte FC el sábado será crucial para recuperar terreno.