Regina Hall, Amy Schumer y Wanda Sykes, ellas serán las anfitrionas de la noche más importante de Hollywood tras meses de especulaciones, las mújeres tratarán de atraer con su energía humorística a un público que se muestra cada vez más reticente. Es un hecho, los Oscar pierden audiencia progresivamente, algo que llegó a su extremo en la pasada ceremonia, sus organizadores esperan que unos presentadores bien escogidos logren sintonizar con la audiencia.