Infecciones previas por virus y gérmenes pueden desencadenar su aparición
ELIZABETH FLEURINE
La sepsis es una enfermedad causada por bacterias u otros microrganismos que se produce por una infección, la cual se extiende por todo el cuerpo a través de la sangre poniendo en peligro órganos vitales como el sistema inmune.
La infectóloga Mari González, señaló que esta enfermedad pone en riesgo la vida de las personas ya que, ocasiona una respuesta anormal en el organismo, así como un deterioro en el sistema cardiaco y respiratorio, debido a que dejan de funcionar con normalidad.
“Generalmente esta enfermedad es ocasionada por algún proceso infeccioso que se vivió previamente ya sea por gérmenes, virus, hongos o bacterias, en la cual el paciente requiere tratamiento precoz e intensivo para mejorar su proceso y llegar a recuperarse totalmente”.
Explicó que identificar de forma temprana a los pacientes con esta patología es fundamental, debido a que cada hora que se retrasa la intervención y el tratamiento por medio de antibióticos, incrementan los riesgos y la mortalidad.
“Pese a que algunos de los síntomas como náuseas, mareos, temblores, fiebre y vómito son parecidos a una infección bacteriana normal, la mayoría de los pacientes con sepsis, también experimentan alteración del estado mental, dificultad respiratoria, aumento de la frecuencia cardiaca, caída de la presión arterial y falla en los órganos”.
Comentó que, pese a su alta incidencia y las muertes provocadas por año, aún existe un gran desconocimiento en la población, ya que muchos de los que la padecen llegan a la sala de emergencia con un total desconocimiento.
Agregó que para prevenir esta enfermedad es fundamental estar adecuadamente vacunado y evitar las enfermedades que aumentan el riesgo de contraer algún proceso infeccioso, sobre todo los adultos mayores, pacientes con enfermedades crónicas, diabéticos, personas con cáncer e inmunosuprimidos, ya que son los más vulnerable”./ct Foto: Yuliettsha Molina