26/09/15 .- El Papa Francisco dedicó la homilía de la misa que ofició en el Madison Square Garden de la ciudad de Nueva York a los “ciudadanos de segunda categoría“, los que “esconden el rostro” por carecer de derechos.
“Las grandes ciudades se vuelven polos que parecen presentar la pluralidad de maneras que los seres humanos hemos encontrado de responder al sentido de la vida en las circunstancias donde nos encontrábamos”, explicó el pontífice.
“A su vez, las grandes ciudades esconden el rostro de tantos que parecen no tener ciudadanía o ser ciudadanos de segunda categoría”.
“En las grandes ciudades, bajo el ruido del tránsito, bajo ‘el ritmo del cambio’, quedan silenciados tantos rostros por no tener ‘derecho’ a ciudadanía, no tener derecho a ser parte de la ciudad”, agregó Jorge Mario Bergoglio.
Entre esos mencionó a “los extranjeros, los hijos de estos y no solo que no logran la escolarización, los privados de seguro médico, los sintecho, los ancianos solos-, quedando al borde de nuestras calles, en nuestras veredas, en un anonimato ensordecedor”.
“Se convierten en parte de un paisaje urbano que lentamente se va naturalizando ante nuestros ojos y especialmente en nuestro corazón”, dijo Francisco.
Discurso en la ONU
El papa Francisco llamó el viernes a evitar el “abuso” de los países en desarrollo a través de su “sumisión asfixiante” en el sistema financiero mundial y denunció el narcotráfico que “silenciosamente” mata a millones de personas, en un histórico discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).
Ante el pleno de Naciones Unidas en Nueva York, el sumo pontífice argentino pidió además un acuerdo “eficaz” sobre cambio climático e instó a respetar la “ley moral” de la distinción natural entre hombre y mujer”.
Francisco, de gira en Estados Unidos desde el miércoles y que habló en español, dio además su apoyo al acuerdo sellado entre Irán y las grandes potencias sobre el programa nuclear de Teherán, calificándolo de “prueba de buena voluntad y derecho”.
Emotivo encuentro con niños de Harlem
El Papa Francisco protagonizó el viernes por la tarde un emotivo encuentro con niños e inmigrantes latinoamericanos en una visita a la escuela católica “Our Lady Queens of Angel” de East Harlem.
El sumo pontífice argentino fue recibido por una multitud en la puerta de la escuela de este tradicional barrio desfavorecido de mayoría latina, y se tomó su tiempo para saludar y dejar que le tomen fotos.
Acompañado por el arzobispo de Nueva York, Timothy Dolan, ingresó a un aula de la escuela donde lo esperaban responsables de varias escuelas y estudiantes, que comenzaron a cantar al verlo llegar.
La visita a la escuela fue la tercera actividad del viernes para Francisco en Nueva York, luego de su discurso en la ONU y un servicio interreligioso en el Memorial del 11 de Septiembre.