Mantener el promedio de ventas es un reto

DORIANA BORREGO

Las fuertes precipitaciones que se han presentado las últimas semanas han influido en el proceso regular de compra y venta, por lo que cada vez son más comercios los que han sido afectados por la temporada de lluvias.

“Ya todos sabemos que lo que es el traslado de la mercancía es un dolor de cabeza, a eso ahora súmale que la gente no está saliendo casi porque cuando llueven prefieren irse directo a sus casas o en su defecto, posponen las compras que tienen que hacer, eso lo vemos reflejado en los cierres de fin de mes, uno piensa que no influye mucho, pero para quienes no tienen tantas ganancias cada granito de arena cuenta, nosotros pasamos por tiempos difíciles pero lo cierto es que los impuestos hay que pagarlos produzcas o no produzcas”.

Así lo comentó Javier Noguera, un emprendedor que se dedica a la venta de postres en el Casco Central de Carrizal y al igual que muchos miembros del sector económico, se ha enfrentado a las consecuencias de las fuertes lluvias.

Motivado a este cambio climático, el servicio eléctrico ha sido bastante inestable, además, se han reportado fallas en la conectividad de puntos de venta y la señal de telefonía móvil, lo que dificulta las transacciones de pago en los establecimientos.

“Ayer no había luz, la gente quería venir a comprar algo para comer porque si son de la zona en sus casas tampoco tenían luz, pero adivina qué, no había como cancelar porque ni señal hay para pedirles un pago móvil”, comentó una trabajadora de un restaurante ubicado en la calle El Parque en Carrizal./at