Los cuatro costados de la capital mirandina lucieron su peor fachada durante este asueto carnestolendo, en el que el aseo brilló por su ausencia, al punto de que en varios sectores optaron por quemar los desechos
Cansados de que las moscas, ratas y gusanos se metan a las casas y generen enfermedades a niños y adultos mayores, están los habitantes de El Nacional, quienes todavía mantienen la esperanza de que en algún momento pase un camión del aseo.
Mientras ocurre ese milagro, deben vivir entre la pestilencia. “El vertedero se quedó pequeño. Aquí botan la basura los vecinos de La Cañada, Los Mangos y otros sectores. Si seguimos así, tendremos que comprar palas y máscaras para salir a la calle”, destacó Wilson Pedrosa./JB/ac/Fotógrafo: Eduardo Aguilar