“Aguantar de 45 minutos hasta una hora o más es un calvario, aquí no hay techo para protegernos del sol ni de la lluvia; sin contar con el hedor tan inaguantable que se emana de la quebrada y del terreno que jamás limpian y que usan los ociosos como un baño público”.

El testimonio pertenece a Néstor Rojas, habitante del sector Los Límites, tras asegurar que ha sido muy caro el precio que han tenido que pagar por tener la parada de los Transmiranda más céntrica, en la avenida Francisco de Miranda.

La línea que cubre la ruta hacia Caballitos y Los Límites fue movida hace tres meses desde el terminal sub urbano de Los Lagos hasta este punto, atendiendo al plan de reordenamiento de paradas del transporte púbico impulsado por la Alcaldía de Guaicaipuro.

Froilán Ibarra, supervisor de los Transmiranda, informó a Avance que las condiciones no están dadas para conductores ni usuarios, por las incomodidades que deben soportar. “Sin embargo, nos regimos por lo que digan las autoridades, los pasajeros manifiestan su inconformidad, pero no podemos hacer nada. Procuramos brindar el mejor servicio posible entre las 5:30 a.m. hasta las 9:00 p.m, aún y cuando aquí no hay ni alumbrado púbico; a veces les toca esperar bastante tiempo porque tenemos pocas unidades disponibles por el problema del gasoil”, expresó.