Nuevas lluvias y alertas meteorológicas frenaron este domingo las labores de búsqueda por las inundaciones en Texas, donde suman al menos 120 muertos y persisten casi 170 personas desaparecidas tras las tormentas de hace una semana, en su mayoría en el condado de Kerr.
El Departamento de Policía de la ciudad de Kerrville, la principal zona afectada, informó por la suspensión de las operaciones de búsqueda en tierra ante una alerta de riesgo «alto» de inundaciones repentinas por la crecida del río Guadalupe.
«Estamos viendo lluvia intensa en Kerrville en este momento. Las operaciones de voluntarios están en este momento suspendidas hasta nuevo aviso. Todos los voluntarios desplegados por su cuenta necesitan atender esta alarma y su seguridad», expuso el organismo en sus redes sociales.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, aseveró que el estado estaba «monitoreando todos los condados con un enfoque en salvar vidas», por lo que había rescates en los condados de San Saba, Lampasas y Schleicher, además de desalojos en Lampasas, Menard , Kimble, y Sutton, adicionales a los de la zona afectada de Kerr. Fuente: EFE/Unión Radio.