Javier Mascherano, para muchos ya es un indiscutible del Fútbol Club Barcelona, pero esta etiqueta de indiscutible le ha costado muchos años, que se resumen en una simple jugada.
El jugador argentino ha confesado para ‘The Guardian’ que en su carrera en el Barça hubo un momento que cambió radicalmente, a mejor. Tras el paso de unos meses de su fichaje en 2010, Javier notaba que no iba a durar muchos años en el conjunto blaugrana, que no se podía adaptar al estilo culé. Fue entonces, en la eliminatoria contra el Arsenal de Champions cuando su estancia en el club de Barcelona dio un giro de 180 grados.
El conjunto de Wenger tenía la oportunidad de pasar la eliminatoria con un gol más, y la oportunidad de hacerlo la tuvo el danés Bendtner. Sin embargo, Mascherano se cruzó en su disparo y evito un gol, que dejaba fuera al FC Barcelona, de una Champions que posteriormente ganó. “Aquel momento me marcó. Si Bendtner hubiera controlado la pelota y se hubiera marchado hacia el otro lado… Ufff No sé que hubiera pasado entonces. Pero sucedió de esa forma y aquel año terminamos ganando la Champions” afirmó.
Javier comentó que a partir de ese momento su posición pasó a ser la defensa central, con una ‘menor’ influyencia en el juego ofensivo, dejando ese papel a Busquets, que sin duda es uno de los mejores del mundo, como también admite Mascherano. “Yo sabía que no iba a tener lugar con Sergio Busquets . Es imposible pensar en otro jugador en cualquier parte que pueda hacer lo que hace Busquets para este equipo … No hay uno”.
Fuente: 90min.