Dos presos y un agente de seguridad heridos es el saldo preliminar de un motín que estalló el miércoles en la prisión Antonio Amaro, ubicada en la ciudad de Río Branco, capital del estado brasilero de Acre y aún no se conoce si la policía tiene controlada la situación.
Según las autoridades, la revuelta comenzó en horas de la mañana cuando un grupo de aproximadamente 13 reclusos tomó como rehenes a dos policías en el pabellón de aislamiento del penal, uno de ellos herido por el roce de una bala en el rostro, detalló el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública.
La Secretaría de Justicia y Seguridad Pública de Acre (Sejusp) informó que “dos presos resultaron heridos durante un enfrentamiento interno entre miembros de organizaciones criminales rivales y fueron trasladados a un centro médico cercano”. Tiempo después uno de ellos fue dado de alta.