Ciudadanos en descontento porque no se incrementó el salario mínimo

DORIANA BORREGO

Quienes perciben salario mínimo, esperaban que el anuncio del Ejecutivo nacional diera un giro de 180 grados al panorama económico con el que deben sobrevivir cada mes; sin embargo, al contrario de lo que muchos tenían en mente, el sueldo base no fue modificado, lo cual es criticado por muchos trabajadores.

Al realizar una encuesta en múltiples zonas de Los Teques, las personas se mostraron descontentas; no obstante, explicaron que no creían que el anuncio fuera a ser el inicio de un gran cambio.

“Ese aumento es totalmente negativo, al final no vamos a llegar a nada, al momento de cobrar las prestaciones quedamos en lo mismo porque no se hizo el ajuste que se debería. Yo no sé qué pasó que nos dejaron en el aire, todos teníamos muchas esperanzas en eso” Indicó Johana Tirado, empleada pública.

“Todo lo que percibimos extra se calcula en base al mínimo, a la hora del té el poder adquisitivo de los empleados públicos se quedó en el aire”, dijo.

Por otro lado, Miguel Nieves, quién circulaba por las cercanías de la Plaza Miranda, denominó el ajuste como una burla, además, sostuvo que la situación económica lo obligó a hacer un cambio rotundo a su estilo de vida.

“El supuesto ajuste se puede definir solamente como un burla para los trabajadores, las dificultades económicas mermaron mi poder adquisitivo; tenía un negocio propio y mi trabajo estable, pero las cosas se fueron en picada, por eso ahora con más razón, prefiero mantenerme a flote con algún oficio que como empleado público, porque ni con los bonos alcanza para vivir bien”, explicó.

Algunos sostuvieron que incluso en algunos establecimientos se realizaron ajustes en los precios, pero el presupuesto para el consumo mensual, sigue estando muy por debajo de lo esperado.

 “Es muy duro continuar así, incluso muchos comercios ajustaron sus precios por el supuesto aumento, pero nosotros seguimos con una remuneración que deja mucho que desear. Salir cada día de casa a la oficina y no tener ni para tomar un café es desmotivador, se siente como si no importara nuestra gestión, como si fuéramos un engranaje sin el que puede funcionar la rueda y eso es algo muy cruel después de tantos años de servicio”, expresó Javier Carvajal, quien se encuentra a menos de tres años de llegar a su jubilación./at