El observatorio Alma, situado en pleno desierto de Atacama, anunció hoy que se unirá a otros telescopios de distintas partes del planeta para formar el telescopio “más grande de la Tierra”, cuyo alcance equivale a distinguir desde el orbe un objeto de 10 centímetros en la Luna, según fuentes del radiotelescopio chileno.
En un comunicado, ALMA, considerada una de las plataformas astronómicas más grande del mundo, explica que la técnica consiste en “combinar los datos de dos o más telescopios, para formar un telescopio virtual con un tamaño igual a la distancia geográfica comprendida entre ellos”.
Esto como parte de un proyecto internacional que permitirá “la creación de un telescopio virtual del tamaño de la Tierra”, con una altísima resolución, por medio de la técnica de interferometría de línea de base muy larga (VLBI, por su sigla en inglés).
Asimismo, la entidad indicó que este año han realizado tres pruebas de VLBI con otros telescopios internacionales, como paso esencial para incluir a ALMA en el proyecto “Event Horizon Telescope”, red mundial de telescopios que estudiará el agujero negro supermasivo ubicado en el centro de la Vía Láctea.
Para que el observatorio pudiera ser parte de este proyecto, tuvo que aumentar la capacidad de sus telescopios, al nivel de potenciar sus 66 antenas para que estas funcionen al mismo tiempo como una sola, de una superficie de 85 metros de diámetro, para luego ser parte de un telescopio VLBI mucho más grande.
La primera prueba de capacidad para funcionar en VLBI se llevó a cabo en enero de este año, donde uno de los telescopios de ALMA se enlazó con el telescopio Atacama Pathfinder Experiment, ubicado a una distancia de dos kilómetros.
En marzo, esta misma prueba alcanzó mayores distancias al formarse un enlace exitoso con el radiotelescopio de 30 metros del Institut de Radioastronomie Millimetrique (IRAM), situado en Sierra Nevada, al sur de España.
Los datos obtenidos de esta última unión se combinaron en una sola observación con una resolución de 34 microsegundos de arco, lo que equivale a distinguir un objeto de menos de diez centímetros en la Luna, vista desde la Tierra.
La observación más reciente se realizó en agosto, donde ALMA se enlazó con seis antenas del Observatorio Radioastronómico Nacional de Estados Unidos, lo que formó un telescopio virtual del tamaño de la Tierra, que observó el cuásar 3C 454.3, uno de los objetos más brillantes en el cielo, a pesar de encontrarse a una distancia de 7.800 millones de años luz.
Fuente: terra.com