28/09/15.- El papa Francisco pidió el domingo en Philadelphia dejar de lado las “divisiones estériles” y “proteger” al mundo, en una multitudinaria misa de cierre de su exitosa gira por Estados Unidos, tras reunirse con víctimas de pedofilia.
“Nuestra casa común no tolera más divisiones estériles. El desafío urgente de proteger nuestra casa incluye la preocupación de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral, pues sabemos que las cosas pueden cambiar”, dijo el Papa.
En su despedida tras seis días de gira por Washington, Nueva York y Philadelphia, el sumo pontífice argentino Jorge Mario Bergoglio, de 78 años, hizo un llamado a la unidad, al diálogo y la tolerancia ante cientos de miles de personas llegadas de todo el planeta para el VIII Encuentro Mundial de la Familia.
“Dios llora”
Por la mañana, Francisco protagonizó una muy esperada reunión con víctimas de actos pedófilos cometidos por sacerdotes, dijo que “Dios llora” por esos abusos y les prometió que los responsables “rendirán cuenta”.
“Dios llora. Los crímenes contra menores no pueden ser mantenidos en secreto por más tiempo”, afirmó a los obispos estadounidenses al informarles del encuentro poco después en el Seminario San Carlos Borromeo.
“Me comprometo a la celosa vigilancia de la Iglesia para proteger a los menores y prometo que todos los responsables rendirán cuenta”, agregó el primer Papa del continente americano.
Visita a prisión
En otro día con una agenda cargada, el papa cumplió con una actividad que a menudo forma parte de sus viajes pastorales, dirigiéndose a la prisión de Curran-Fromhold en las afueras de Philadelphia.
“He venido como pastor pero sobre todo como hermano a compartir su situación y hacerla también mía”, dijo en un discurso antes de estrechar la mano uno por uno a los presos sentados en filas en un amplio hall.
En su mensaje en español, criticó que “es penoso constatar sistemas penitenciarios que no buscan curar las llagas, sanar las heridas, generar nuevas oportunidades”, en un país que aplica la pena de muerte.