El partido oficialista logró una victoria decisiva a nivel nacional, obteniendo un fuerte respaldo en ambas cámaras del Congreso para avanzar con sus reformas económicas

El partido oficialista La Libertad Avanza (LLA), liderado por el presidente Javier Milei, se alzó con una contundente victoria en las elecciones legislativas nacionales celebradas ayer en Argentina. Con más del 40% de los votos a nivel nacional para la Cámara de Diputados, la fuerza de gobierno superó ampliamente a la oposición y se consolidó como el bloque con mayor caudal electoral, obteniendo un espaldarazo clave para la segunda etapa de su mandato.

Este triunfo se tradujo en una ganancia significativa de escaños en el Poder Legislativo. En la Cámara Baja, La Libertad Avanza (en alianza con el PRO en varios distritos) sumó 64 de las 127 bancas en juego, lo que amplía considerablemente su bloque, acercándolo a los 107 diputados. En el Senado, donde se renovaba un tercio de las bancas, el oficialismo también mejoró su posición, ganando en seis de las ocho provincias y sumando 13 senadores, un avance crucial para equilibrar fuerzas en un recinto que históricamente le fue adverso.

La coalición peronista Fuerza Patria (y sus aliados locales) se ubicó como la segunda fuerza más votada, con un caudal de votos que ronda el 31,7% a nivel nacional, lo que se traduce en la obtención de 44 bancas. A pesar de mantener la primera minoría total de escaños en Diputados, la coalición perdió peso legislativo, lo que la obliga a redefinir su estrategia de oposición. La jornada se destacó además por una baja participación ciudadana, la cual alcanzó el 67,85%, la más reducida desde la vuelta a la democracia. El presidente Milei interpretó los resultados como un mandato popular para impulsar un “Congreso más reformista”.