Obreros aseguran que en la vía a El Cují, en Los Salias, echaron 180 toneladas pero los conductores se quejan de la lentitud de los trabajos

“Yo solo vine acá a reventar unos cocos y a fumarme unos tabacos”, fue lo que comento una de las pocas personas que el equipo de Avanceencontró en la vía a El Cují, donde los altares y la basura son una constante. Para la edil Ana Melchor, integrante del Comité Antiinvasión de Los Salias, la contaminación de las fuentes de agua y las tomas ilegales de terreno son algunos de los problemas a erradicar en esta zona, en la que la falta de vigilancia policial y ambiental han sido cómplices de estas situaciones.

Aseguró que de cada construcción ilegal que detectan sus dueños son citados a la Alcaldía para conocer su procedencia y el fin de la invasión. “En los últimos días conseguimos ocho ranchos, de los cuales solo uno de sus propietarios confesó ser santero”.

También, declaró que la comisión ha establecido mesas de diálogo únicamente con espiritistas, que según ha manifestado son los que más daños causan al ecosistema, ya que utilizan el sacrificio de animales para sus ritos.

“Hemos tenido la voluntad de hablar con ellos, pero nunca hemos podido dar con al menos uno, y eso nos preocupa. Sabemos que en el país hay libertad de culto, pero nos oponemos a la destrucción que ellos generan al ambiente”.

En este lugar se ve de todo

Una lugareña, que pidió no ser identificada, contó que se han conocido violaciones, trabajos con restos humanos y que hasta algunos vecinos se han topado con cualquier cantidad de cadáveres de gallinas, chivos, gatos, entre otros. “Uno se cohíbe de llamarles la atención porque esa gente se cree dueña de todo este lugar, y eso no debería ser así. Pedimos a todas las autoridades que intervengan y no bajen la guardia”.

Justo antes del puente Bejarano, un cartel prohíbe arrojar desechos a un costado del camino y sin embargo, la zona parece un mini vertedero de desechos. La mayoría de los escombros proviene de los rituales que son el pan de cada día allí. Hay velones, ramas, candelabros, etc.

Asfaltado a medias  

Aunque Luis Meza, capataz de los obreros dependientes de Ministerio de Transporte Terrestre, indicó que a diario están colocando 180 toneladas de pavimento, pero la realidad es que las maquinarías están justo en el mismo punto de hace dos meses, lo que demuestra el avance ha sido nulo. Por ello, es raspado de la vía constituye otro riesgo para los osados conductores que toman esta deviación para evitar el tráfico de la carretera Panamericana y ganar tiempo de regreso a sus hogares.

El Casino del Diablo

Uno de los diez guardianes de altares que se encontraron en la carretera de El Cují aseguró que esa zona es conocida como el casino del diablo. porque es utilizada por gente del lugar y foráneos para elevar plegarias. Precisamente, la concejala Melchor comentó que producto de estos cultos los vecinos han denunciado la presencia de objetos y muestras fecales de enfermos, que van a parar a los ríos sin ningún tipo de cuidado. Aprovechó para exhortar al Ministerio del Ambiente a ponerle el ojo a este sector, pues, los desperdicios a parar al embalse La Mariposa.

Alcaldía desmalezó parte de la ruta

Más de 30 obreros de Servicio Públicos de la Alcaldía de Los Salias, machete en mano, lograron desmalezar 5 kilómetro de trayecto entre Figueroa y El Cují desde este martes, según informó Edgar Piñerua, jefe de las cuadrillas./fp